Arturo Lafalla
Bienvenida la minería a Mendoza y perdón por preguntar
Resulta difícil de entender es por qué fastidia, molesta tanto a sus impulsores, que algunos preguntemos o sugiramos recaudos a tomar para que el proyecto resulte mejor, para Mendoza.El punto central de la crítica se basa en la necesidad de clarificar los números específicos de la inversión y el retorno. El autor, utilizando datos provistos por el Director de Minería (regalía del 3% equivalente a $14 millones anuales) y el CEO de San Jorge, calcula el valor total del cobre en unos $7.466 millones y el beneficio bruto estimado para la empresa en $4.762 millones de dólares, descontando una inversión total de $2.480 millones y regalías. Se exige saber el desglose de la inversión (cuánto se destina a empleo local e insumos vs. importaciones), el impacto real del RIGI en los impuestos (reducción del 35% al 25% en Ganancias) y cuánto de lo tributado quedará en la provincia, insistiendo en que la aprobación final requiere una comparación clara con el valor real de mercado para asegurar que Mendoza reciba una compensación justa.
Sí, y qué bueno que un proyecto como San Jorge avance.
¿Por qué el enojo?
Lo que resulta difícil de entender es por qué fastidia, molesta tanto a sus impulsores, que algunos preguntemos o sugiramos recaudos a tomar para que el proyecto resulte mejor, para Mendoza.
Volvemos a la torpe antinomia que se instala en el país en todos los temas trascendentes en un claro a favor o en contra, cuando en todos los temas complejos, y este vaya si lo es, lo mejor resultará seguramente de contemplar todas las aristas y tomar la mejor solución posible.
Lo que sabemos los ciudadanos de a pie de la minería

Uno de los temas trascendentes, no el único ni tal vez el principal, está el muy importante tema ambiental, es el del beneficio económico que quedará para los mendocinos, sabiendo que habrán pasivos ambientales y que como todas las actividades extractivas, es una actividad temporaria. Sabemos también que lo que se extrae, en este caso cobre fundamentalmente, es uno de los recursos más valorado en el mundo por su imprescindibilidad en todo lo que significa la conducción del fluido eléctrico, cuyo uso, se prevé, se multiplicará exponencialmente.
Bueno también es recordar que hay muy varias experiencias de explotaciones mineras, de exitosas e imitables como en Nueva Zelanda, Australia, y otras muy deplorables como las ocurridas en varios países africanos. Tanto en el aspecto económico como en el ambiental.
Lo que estamos vendiendo
Con claridad, estamos vendiendo un recurso valioso y no renovable. Esto se cuantifica económicamente, tiene precio, se vende, como tantas cosas en este mundo. ¿Por qué entonces molesta tanto que preguntemos cuánto le quedara a los mendocinos de ese valor, el de nuestro cobre?
Las respuestas enfáticas que escuchamos es que generará muchos puestos de trabajo, que requerirá servicios locales, insumos a proveer a la minera San Jorge, etc. Bien, cuántos, es lo que preguntamos. ¿Cuántos puestos de trabajo? ¿Qué insumos y en qué cantidad? El CEO de la empresa nos dice que tienen previsto invertir en los próximos dos años, en el período de instalación, 560 millones de dólares (no somos tan necios para no entender que esa cifra será ajustable en la medida que se avance en los detalles del proyecto, como pasa en toda obra humana) ahora bien, cómo se componen a hoy esos 560 millones que son los que calcula San Jorge, no el que suscribe o algunos molestos mendocinos que no entienden la complejidad del proceso minero. ¿Cuánto de eso es para la adquisición de maquinarias importadas? ¿Cuánto se invertirá en desarrollos de ingeniería necesaria para el proyecto? ¿Dónde? ¿Cuantos insumos para la construcción del campamento serán provistos por empresas locales? Recordemos que por el RIGI no pagarán derechos de importación de bienes y podrán también hacer importaciones temporarias sin tributo alguno. Si yo fuera el CEO de San Jorge respondería que los voy a comprar donde estén más baratos, y tendría razón.
El valor en dólares de nuestro cobre
El propio Director de Minería habló de que las regalías al 3% implicarían unos 14 millones de dólares anuales. No hace falta recurrir a IA para entender que está calculando el resultado económico global del proyecto, porque si sé cuánto es el 3%, tengo que saber cuál es el 100 por ciento. El cálculo podría ser: multiplicamos 14 millones por los 16 años de vida útil que se estima para el proyecto (según SJ) serían 224 millones, y si eso es el 3%, el 100, es 7.466 millones de dólares, el valor estimado hoy del cobre que estamos vendiendo. Insisto, este cálculo lo hacemos en base a los datos aportados por el mencionado Director, que con los números que en su momento expusimos.
El costo según San Jorge para extraer nuestro cobre
Dice también el CEO de San Jorge que tienen previsto invertir 120 millones anuales en la explotación del yacimiento, lo que multiplicado por 16 años nos da 1.920 millones de dólares, sumados a los 560 que dice que invertirán en la instalación, suma 2.480 millones de dólares en salarios, maquinarias, alimentos, insumos, que reitero no está de ninguna manera claro dónde los comprarán, y está bien que así sea. Son las leyes del mercado. Por otro lado, esos números son estimación, y es lógico que intenten hacerlo con menos, por nuevas tecnologías, etc., esto es, no hay sanción si la inversión resulta menor a lo estimado, es pura y esperable eficiencia empresarial.
El beneficio para San Jorge
Ahora bien, sumemos y restemos. El precio de nuestro cobre, a hoy, sería entonces de 7.466 millones de dólares, y el monto a invertir de 2.480 millones, según las estimaciones oficiales y del propio CEO de San Jorge, no son números que inventó este desinformado ciudadano que concurrió a la Audiencia Pública e hizo estas preguntas sin obtener respuesta alguna del ministerio a cargo de realizar la misma. Hay una diferencia a favor de San Jorge, estimativa de 4.986 millones de dólares, a los que hay que restarles los muy humildes 224 millones de regalías, le quedarían entonces 4.762 millones, a los que obviamente hay que restar el monto correspondiente a impuestos que deban tributar.
El monto de esos impuestos
Anunció recientemente San Jorge que ha iniciado el proceso para suscribirse al RIGI, lo que suena más que previsible. Sabido es que la Provincia adhirió a ese sistema sin condicionamientos. Eso implica por ejemplo que del 35% de ganancias que paga cualquier contribuyente de ese nivel, San Jorge pagaría el 25%, la diferencia no es poca. Cabe preguntarse, ¿era necesaria esa rebaja para que SJ se hiciera cargo de la explotación? En San Juan se ha desarrollado la minería sin el RIGI, ¿por qué acá no?
Bien, con ese régimen y si se mantienen las variantes del proyecto como hoy están, ¿cuánto se estima que deberán tributar? ¿Y esos montos cuánto quedará en la provincia y cuanto en la Nación?.
¿Cómo resolver el sí definitivo al proyecto San Jorge sin tener claros esos números, sin saber y poder comparar con otras experiencias similares, si lo que estaríamos recibiendo se ajusta a los valores de mercado, cómo saber que nos están pagando como a los australianos y no como a los congoleses? ¿Cuánto le quedó en limpio a Catamarca después de su explotación similar en Bajo la Lumbrera, entre los años 1997 y 2018?
Perdón por preguntar, pero el haber rodado mucho no es ciencia, pero tampoco es pecao, como decía Atahualpa en sus coplas.
