Nuestras mascotas ganan más territorio cada día. Son raros los casos de los perros que duermen en el patio o que comen las sobras de la familia. Afortunadamente, las costumbres han cambiado y cada vez somos más conscientes de los cuidados de los animales.
Y aunque parece que los perros de hoy tienen conductas casi humanas, todavía conservan algunos rasgos de sus ancestros salvajes. Uno de ellos es la tendencia a proteger los recursos valiosos, como el alimento, especialmente cuando se perciben situaciones de posible competencia o amenaza.

No es una rareza que, aunque tu perro coma todos los días, esconda un trozo de pan o algún alimento en otra habitación o en el jardín de casa. Tampoco es de extrañar que si recibes visitas o aparece otro animal corra desesperado a buscar su precioso trozo de pan.
Este comportamiento de ‘alejarse con el botín’ sirve para evitar conflictos directos con otros individuos y preservar el acceso al recurso sin necesidad de confrontación.En el contexto doméstico, ese mismo patrón puede activarse incluso sin competencia real.
Trasladar el alimento a otro espacio le permite comer más tranquilo, con la sensación de que está ejerciendo control sobre su entorno. La próxima vez que lo veas esconder algo no te enojes, es solo su instinto.