A una semana de la Cumbre del Mercosur que se celebra el 20 de diciembre en Foz de Iguazú, el presidente Javier Milei tiene intenciones de dar el presente, pero define su asistencia en función de la agenda para la semana próxima.

Desde su entorno no descartan la posibilidad y anticipan que, de participar, insistirá con la necesidad de que el bloque se abra al libre comercio y rompa con las reglas internas del Mercosur que limitan los entendimientos con el resto de los países.

Milei tiene intenciones de dar el presente en el intercambio del bloque que preside su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo vínculo no es el más aceitado, incluso fuentes oficiales confirmaron que lo tiene en agenda, pero aclararon que su confirmación está sujeta a las actividades previstas para los próximos días.

Sin embargo, desde la mesa chica que rodea a Milei definen los lineamientos que podría llegar a plantear en la instancia de debate del bloque regional que iniciará el 17 de diciembre. En Casa Rosada insisten en que el Mercosur “requiere cambios” que den lugar a la apertura comercial de los países miembros por fuera.

“Todavía no está definida su asistencia, pero de ir volverá a insistir con las bondades de libre comercio y planteará la necesidad de que los países integrantes puedan abrirse comercialmente”, sostuvo una importante voz con acceso al despacho presidencial.

No se trata de un planeo nuevo

En junio de este año, en el marco de la Cumbre de Líderes, Milei propuso modificar la normativa del Mercosur que impide negociar entendimientos de libre comercio sin el visto bueno de los países socios.

“Propusimos que, como bloque, nos movamos hacia un esquema comercial y regulatorio mucho más libre, en lugar de la cortina de hierro a la que hoy estamos sometidos, en el que cada país pueda gozar de mayor autonomía para aprovechar sus ventajas comparativas y su potencial exportador”, sostuvo en aquella oportunidad.

Otro de los puntos que cuenta con la bendición del libertario es la posibilidad de concretar el tan ansiado acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, que lleva ya al menos 20 años en vilo.

A algo similar apuesta Lula Da Silva, quien intentará mostrarse como el garante de la unidad entre Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia con la Unión Europea.

En la Cumbre del Grupo de los 20 que se celebró a finales de noviembre en Johannesburgo, Sudáfrica, de la que Milei se ausentó, el brasileño anticipó que el entendimiento se firmaría el 20 de este mes en sus tierras. Si bien hay algunos países como Francia que se muestran reticentes, en Europa ven con optimismo la posibilidad de concretar el tan prologando acuerdo.

En Balcarce 50 los esperanza la posibilidad de avanzar en la eliminación de aranceles, la creación de una zona de libre comercio y la puesta en pie de reglas que garanticen que beneficien a ambos bloques.

Asimismo, el acercamiento del líder del Partido de los Trabajadores (PT) a Donald Trump fue bien recibido por la administración libertaria que ya planea una nueva visita del mandatario a Estados Unidos.

Una importante fuente reveló que el nuevo desembarco aspira a solucionar las rispideces generadas luego de que el mandatario declinara la invitación a participar del sorteo del Mundial 2026 que se realizó el 5 de diciembre en Washington, algo que no cayó del todo bien en el gobierno republicano.