La inversión en la economía argentina registró un notable repunte en junio, con una suba del 31,4% interanual, de acuerdo con un informe de la consultora Orlando J. Ferreres. Medida en términos de volumen físico —es decir, sin considerar el impacto de la inflación—, la Inversión Bruta Interna Mensual (IBIM) alcanzó los USD 7.761 millones, lo que representa una recuperación significativa respecto de los niveles observados en la segunda mitad de 2023.
“El crecimiento marca una recuperación del nivel de inversión que se observaba antes de la caída del segundo semestre del año pasado”, indicó el estudio, que se publica mensualmente y combina ocho series estadísticas para ofrecer una estimación temprana de la evolución de la inversión.
El dato más llamativo del informe de junio fue el fuerte crecimiento en la inversión en maquinaria y equipo, que escaló un 56,9% interanual. En el acumulado del primer semestre, este rubro presenta un alza del 48,9%, impulsado principalmente por la importación de bienes de capital.
En efecto, la inversión en maquinaria importada se disparó un 107,4% en junio, el mayor crecimiento interanual para esta variable desde 2004. En tanto, la inversión en bienes nacionales también mostró un desempeño positivo, aunque más moderado, con una suba del 20,2%.
El indicador IBIM, que elabora Ferreres, alcanzó los USD 7.761 millones en volumen físico.
El estudio privado se alinea con los datos del Indec, que reportó una expansión del 98,3% en las cantidades importadas de bienes de capital durante el mismo mes. Este comportamiento se explica, en parte, por un tipo de cambio oficial que, en ese momento, mantenía condiciones favorables para las importaciones, lo que alentó la adquisición de equipamiento por parte del sector privado.
Por otra parte, la inversión en construcción —el otro gran componente del indicador— también mostró señales de recuperación, con una suba del 8,9% en junio, tras la caída registrada en mayo debido al bajo despacho de cemento. En los primeros seis meses del año, el segmento acumula una expansión del 6,5%.
En conjunto, los datos reflejan una mejora en el clima de inversión, favorecida por un entorno de mayor previsibilidad cambiaria y una mejora en la disponibilidad de insumos importados. Aunque el contexto económico general continúa siendo desafiante, los números de junio marcan un punto de inflexión respecto del desempeño del segundo semestre de 2023.
La consultora Ferreres elabora el IBIM para anticipar la evolución de la Inversión Bruta Interna Fija (IBIF) oficial, que publica el Indec con mayor rezago. Según advierten desde la firma, este indicador mensual permite tener una lectura más ágil de los movimientos en uno de los motores clave del crecimiento económico.