En un avance sin precedentes para la paleoecología, un equipo de científicos ha logrado extraer y analizar ADN microbiano de los restos de 483 mamuts, con muestras que datan de más de un millón de años. El estudio, publicado en la revista científica Cell Press, revela un fascinante vistazo al mundo invisible que habitaba estos gigantes prehistóricos.
El hallazgo más significativo fue la recuperación de un genoma parcial de la bacteria Erysipelothrix a partir de un mamut estepario de 1,1 millones de años, lo que lo convierte en el ADN microbiano asociado a un huésped más antiguo autenticado hasta la fecha.
La investigación demostró que al menos seis clados de microbios lograron persistir en los tejidos de los mamuts a lo largo de diferentes períodos de tiempo y regiones geográficas. Entre ellos se encontraron bacterias de los géneros Actinobacillus, Pasteurella y Streptococcus.

Uno de los descubrimientos más intrigantes es que una de las bacterias relacionadas con Pasteurella había sido previamente vinculada a la muerte de elefantes africanos, los parientes vivos más cercanos de los mamuts.
Esto sugiere que las enfermedades causadas por estos patógenos podrían haber tenido un papel en la ecología y las fluctuaciones poblacionales de la megafauna extinta.
Este estudio es pionero en la obtención de microbiomas animales antiguos y abre una nueva puerta para futuras investigaciones sobre el impacto de los microbios en la evolución, la adaptación a ambientes extremos y la extinción de grandes especies.