Cinco curiosos motivos por los que los masajistas bostezan según expertos

El contexto estresante que las personas viven en la actualidad debido a trabajos sedentarios, en donde pasan sentados la mayor parte del tiempo, provoca casos de contractura muscular graves. Este fenómeno ha generado que se popularicen las salas de masaje y que, a la vez, más curiosos se interesen en el arte de esta práctica.

Respecto a un caso curioso en el universo de los masajes, ocurre que hay terapeutas que bostezan a medida que realizan su trabajo. Mientras que hay quienes piensan que este gesto es debido al desinterés o cansancio del masajista, hay expertos que, por el contrario, postulan que esto se debe a una manera de potenciar la experiencia de relajación.

Según investigaciones, el bostezo es una respuesta del sistema nervioso parasimpático, que se encarga de mantener al cuerpo bajo un estado de calma. La explicación es que, cuando el masajista está concentrado, la intensidad de su respiración se vuelve más honda y su ritmo cardíaco se ralentiza, entrando en un estado de tranquilidad absoluta y de autorregulación. 

Otra causa puede ser la que los expertos llaman como “contagio emocional”. Esto es que, el masajista entra en un trance de empatía corporal cuando trabaja sobre los músculos de sus clientes. 

La práctica del masaje estimularía la liberación de oxitocina y serotonina, lo que provoca que el terapeuta bostece y entre en un estado de calma, ablandando los músculos que están tensos.
 

Cinco razones por las que el masajista bosteza

1. Activa el sistema parasimpático: ayuda a pasar de un estado de alerta a uno de relajación.
2. Regula la respiración: mejora la oxigenación del cerebro y evita la fatiga.
3. Genera el contagio empático: el cuerpo responde a la calma del paciente, generando sincronía emocional.
4. Libera tensiones propias: descarga el estrés físico del masajista.
5. Es señal de concentración profunda: el bostezo ocurre en estados de enfoque y calma mental.