OpenAI ha lanzado oficialmente GPT-5, su nuevo modelo de inteligencia artificial de referencia, que según la compañía marca un hito en el camino hacia la inteligencia artificial general (AGI).
A diferencia de sus predecesores, este modelo no se presenta como una simple mejora incremental, sino como un salto cualitativo en velocidad y capacidad de razonamiento. Las principales diferencias se centran en su capacidad para abordar tareas que antes resultaban más complejas.
La empresa destaca que GPT-5 exhibe mejoras notables en la ejecución de tareas complejas, la escritura creativa y, sobre todo, la codificación, un área donde la precisión es crucial.

Su director, Sam Altman, lo ha calificado como "el mejor modelo del mundo", una afirmación audaz que refleja la confianza de la compañía en las mejoras que lo distinguen de versiones anteriores y de otros modelos de la industria. Se espera que estas capacidades permitan a los desarrolladores crear aplicaciones más avanzadas y fiables.
A pesar del optimismo, el lanzamiento no está exento de cautela. Un portavoz de OpenAI reconoció que el modelo aún tiene "limitaciones clave" en áreas como la memoria a largo plazo y la autonomía. Expertos de la industria tecnológica, como los de TechCrunch, sugieren que el modelo se encuentra, por ahora, "más o menos al mismo nivel" que sus rivales más directos, y que su verdadero impacto solo se podrá medir cuando los desarrolladores comiencen a integrarlo en proyectos del mundo real.
GPT-5 ya está disponible para los más de 700 millones de usuarios semanales de ChatGPT, con una versión Pro exclusiva para suscriptores, marcando el inicio de una nueva era para la inteligencia artificial generativa.