La Agencia de Recaudación y Control Aduanera (ARCA) ha implementado nuevos umbrales para el control de transferencias y otras operaciones financieras, lo que representa una importante actualización en las políticas de monitoreo tanto para bancos como para billeteras virtuales. A partir de septiembre de 2025, el nuevo límite mensual por persona para transferencias se ha fijado en $50.000.000. Esto significa que, si las transferencias mensuales no superan este monto, las entidades financieras no están obligadas a informar a ARCA, reduciendo significativamente la posibilidad de que se solicite un justificativo de fondos.
Nuevos Límites para Diversas Operaciones
La flexibilización de los controles no se limita solo a las transferencias. ARCA ha ajustado otros límites que impactan directamente a los usuarios:
- Saldo de Cuentas: el tope para saldos al último día del mes se elevó a $50.000.000 para personas físicas.
- Plazos Fijos: el monto máximo que se puede operar sin requerir justificación de fondos subió a $100.000.000.
- Extracciones de Efectivo: el nuevo umbral para que las extracciones sean informadas a ARCA es de $10.000.000.
- Tenencias en Sociedades de Bolsa: el límite para personas físicas se estableció en $100.000.000.
Estos cambios simplifican las operaciones para los contribuyentes, ya que se espera que las solicitudes de documentación para respaldar el origen de los fondos sean menos frecuentes. Sin embargo, es crucial tener en cuenta que las entidades financieras pueden aplicar sus propios límites internos, que pueden ser más estrictos que los de ARCA.
A pesar del aumento en los límites, es fundamental que los usuarios puedan justificar el origen de sus fondos ante cualquier eventualidad. Los bancos y las fintech tienen la facultad de retener montos de forma preventiva si una operación es considerada inusual. En estos casos, para liberar el dinero y evitar inconvenientes, ARCA suele solicitar documentación como:
- Contratos de compraventa o boletas de pago.
- Facturas de Monotributo o de régimen general.
- Recibos de sueldo o haberes jubilatorios.
- Certificados emitidos por un contador público.
Tener estos comprobantes a mano es la mejor manera de asegurar que todas las transacciones, incluso las de gran valor, se realicen sin problemas y dentro del marco legal.