En respuesta al aumento constante de precios y la pérdida del poder adquisitivo, el gobierno nacional ha implementado un nuevo refuerzo económico para jubilados y pensionados. Esta medida, anunciada por el presidente Javier Milei, tiene como objetivo principal aliviar el impacto de la inflación y el incremento del costo de vida en los ingresos fijos de los adultos mayores.
Este beneficio se suma a una serie de políticas aplicadas en los últimos meses para proteger los haberes más bajos de la escalada inflacionaria. La iniciativa también incluye ajustes en las prestaciones destinadas a quienes tienen ingresos reducidos, buscando equilibrar su situación financiera.
A partir de agosto de 2025, los beneficiarios de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) no solo recibirán este refuerzo, sino también un aumento del 1.6% en sus jubilaciones, pensiones y asignaciones, en línea con la fórmula de movilidad vigente. Este incremento es automático y acumulativo, lo que potencia el efecto del bono extraordinario que se liquidará junto con el pago mensual.
El Bono Extraordinario Previsional tiene un valor máximo de $70.000 y se abonará con el haber de agosto. Los beneficiarios incluyen jubilados con aportes, pensionados no contributivos (por invalidez, vejez o madres de siete hijos) y quienes reciben la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM). Aquellos que superen el haber mínimo recibirán un monto proporcional hasta alcanzar el tope fijado. ANSES confirmó que la acreditación será automática, sin necesidad de trámites, y que el importe no tendrá descuentos ni será computable para otros fines.