El dueño del laboratorio HBL Pharma, involucrado en el caso en el que se investiga la producción y distribución de fentanilo contaminado y que ya provocó al menos 54 muertes, guardó diversos medicamentos en una fábrica de cables, lo que encendió las alarmas frente al traslado y manipulación de fármacos sin la correspondiente seguridad establecida en la Ley de Buenas Prácticas de Elaboración de Medicamentos.
Los últimos allanamientos realizados, 22 en total, concluyeron con la obtención de material abundante para análisis que luego derivó en las inhibiciones de bienes de más de 30 personas y empresas.
En una de esas pesquisas se encontró algo sorprendente. En el operativo concretado en Cables Epuyén SRL, perteneciente a Damián García Furfaro, hermano del dueño de HLB Pharma, hallaron 29 pallets de diversos medicamentos.
Se trata de aproximadamente un camión completo que contenía diclofenac y paracetamol, todos bajo la firma del laboratorio en cuestión.
Dicha medicación fue trasladada hasta la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) para su resguardo y posterior análisis.
Aunque por el momento no hay confirmación de cuándo fueron trasladados dichos palets hasta la fábrica, ubicada en La Reja, provincia de Buenos Aires, se estima que ocurrió después de que el laboratorio haya sido clausurado.
¿Qué fabrica Cables Epuyén?
Desde hace más de 40 años la fábrica Cables Epuyén suministra “productos destinados a la transmisión de energía, señales análogas y digitales, datos, voz e imagen para aplicaciones industriales, comerciales y domiciliarias que brindan tecnología y eficiencia a las instalaciones”.
Entre los productos más destacados se encuentran cables, carrocerías, naves industriales y hasta racks.
Inhibición de bienes
El 10 de julio se dispuso la inhibición de bienes de personas y empresas involucradas en la causa por el fentanilo adulterado y entre ellas se encuentra Cables Epuyén SRL.
El fallo sostiene que las características del suceso, la magnitud de los hechos investigados y el supuesto entramado societario por detrás de las empresas presuntamente implicadas dan lugar al dictado de medidas urgentes y profundas.
Por su parte, el escrito señala que los presuntos integrantes de la estructura empresarial podrían haber desarrollado maniobras para ocultar conductas delictivas, por lo que constituirían un entorpecimiento de la causa en trámite o el posible riesgo de fuga.
