Claudia Najul fue ministra de Salud y diputada nacional. Actualmente se desempeña como senadora de Cambia Mendoza y este martes fue una de las legisladoras que no acompañó los pedidos de informes que desde la oposición impulsaban para reunir información sobre el exgobernador Rodolfo Suarez. Su caso es la materialización de lo que muchos sospechaban: la doble moral de la dirigencia que nos gobierna.
En el año 2016 la misma Claudia Najul ya se sentaba en una banca de la Legislatura. En el mes de de marzo junto a otros legisladores presentó una denuncia penal en contra de Francisco Pérez y su esposa Celina Sánchez. ¿El motivo? En los medios se había dado a conocer que el matrimonio había adquirido un departamento en las torres Agustinas cuando Pérez era gobernador. Najul -como corresponde- exigió que la Justicia investigue el origen de los fondos que el exmandatario utilizó para la compra del inmueble.
En concreto, en base a información periodística denunciaron a Francisco Pérez por la compra de un Peugeot 3008, una cochera y un departamento "que según fuentes extraoficiales estaría ubicado en un lujoso edificio de departamentos ubicado en el Barrio Bombal llamado Torres Agustinas". "Claro está que tanto el automóvil como la cochera y el departamento ha sido adquiridos por el matrimonio durante la gestión del entonces gobernador Francisco Pérez, lo que -prima facie- no condice con la remuneración percibida como ex funcionario y declarada, debiendo investigarse cuál es el origen de los fondos, tanto de Pérez como de Sánchez, con los que se habrían adquirido esos bienes", se puede leer en la denuncia original. A eso agregan el agravante de que el emprendimiento inmobiliario era de una empresa constructora que es proveedora del Estado.
"Esa empresa constructora fue adjudicataria de grandes obras provinciales, por lo que debería investigarse si existe alguna vinculación entre esas adjudicaciones y el departamento adquirido por Sánchez durante la gestión del exgobernador en el edificio realizada por la mencionada empresa", adhieren los legisladores radicales denunciantes entre los que estaba la senadora Claudia Najul.
Sin embargo, esa misma Claudia Najul bloqueó los pedidos de informes que el senador Martín Rostand presentó para requerir información del patrimonio del exgobernador Rodolfo Suarez. Suarez declaró la compra de dos hectáreas en la zona más exclusiva de Mendoza en el año 2021, cuando era gobernador. Pero además de ello, El Medio confirmó que construyó allí una lujosa casa que no está declarada ni en ATM ni en la Oficina Anticorrupción. El costo de cada hectárea oscila los 100 mil dólares y construir en la localidad de La Carrera es mucho más costoso que en otros puntos de la provincia por las dificultades logísticas que implica.
Rostand pretendía que se pidiera informes a ATM, la Oficina de Ética Pública, el Ministerio Público y la Municipalidad de Tupungato para tener detalles de la situación de la vivienda. La casa está ubicada en Cresta de los Bayos, donde sus únicos dos vecinos son proveedores del Estado a los que Suarez les adjudicó licitaciones y compras directas. En concreto, Santiago Durany fue beneficiado por contratos de pauta publicitaria y Adrián Yacopini, quien además de pauta oficial también fue proveedor de vehículos para la provincia.
En la actitud de Najul se refleja la hipocresía de la dirigencia política. Exigen transparencia solo cuando no incomoda a los propios. Destacan la lucha contra la corrupción pero solo cuando los sospechosos son del partido adversario. Las similitudes entre el caso de Francisco Pérez y Rodolfo Suarez son evidentes. Ambos aumentaron su patrimonio siendo gobernadores. Ambos adquirieron bienes lujosos y en ambos casos en operaciones con proveedores del Estado.
Pero la diferencia entre ambos casos es aún más notoria. En el caso de Pérez se reclamó a gritos que la justicia lo investigue y en 2022 lo terminaron imputando. En el caso de Rodolfo Suarez el silencio de los paladines de la transparencia y el blindaje legislativo para evitar que se pidan informes sobre su patrimonio.