El presidente Gabriel Boric anunció ante la ONU que Chile postulará a la expresidenta, Michelle Bachelet como candidata a la Secretaría General las Naciones Unidas. La ex presidente ya le habría confirmado a sus cercanos la intención de postular oficialmente a la ONU.
Bachelet es parte de la delegación de Chile que participa de la 80° Asamblea General de la ONU. En los discursos de apertura, estuvo sentada junto al presidente Gabriel Boric y el presidente del Senado, Manuel José Ossandón.

Recordemos que Bachelet, entre 2018 y 2022, se desempeñó como alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y ocupa el cargo honorífico de presidenta de la Alianza para la Salud de la Madre, el Recién Nacido y el Niño de la Organización Mundial de la Salud.
De todos modos, el llamado a las candidaturas será en diciembre y estará a cargo de António Guterres. Tras ello, entre enero y febrero, se debe presentar formalmente la candidatura, la cual debe contar con el patrocinio del Estado de Chile.
No será fácil
En altas fuentes diplomáticas señalan que Bachelet difícilmente podrá sortear la resistencia que genera en la administración Trump, por lo que se considera prácticamente inviable que el Consejo de Seguridad -compuesto por EEUU, China, Rusia, Reino Unido y Francia- la recomiende a la asamblea. Una regla no escrita, pero invariable, pasa porque cualquiera de estos 5 países use su derecho a veto.
También hay un frente interno que ya se analiza en la oposición. En el hipotético caso de que Bachelet llegue a la secretaría general, la agenda ONU que ella despliegue puede ser contraria a la política exterior del sucesor de Boric (Kast lidera hasta ahora las encuestas). Embarcarse en su campaña, por lo demás, implica altos recursos económicos y diplomáticos, con una candidatura con baja probabilidad de éxito.
Así, una opinión que ha comenzado a instalarse en parte de la oposición pasa por no vetar a Bachelet en caso de llegar a La Moneda, pero que los recursos para desplegar su campaña queden restringidos a las gestiones del futuro embajador de Chile en la ONU.
Según indicó el ex canciller Hernán Felipe Errázuriz en El Mercurio, Chile ya aporta al menos US$ 32 millones anuales a la ONU, pese a que “la mala gestión y crisis financiera son tan evidentes que solo 53 países, de sus 193 miembros, están al día en sus aportes, mientras Estados Unidos registra atrasos sobre 3 mil millones de dólares, y China, cerca de mil millones”.
La preferida
La semana pasada, la economista y exvicepresidenta de Costa Rica, Rebeca Grynspan, 69, marcó su decisión de correr por la secretaría general de la ONU.
El perfil de centro de Grynspan; su actual rol de jefa de comercio en Naciones Unidas y el apoyo de la Casa Blanca que —de acuerdo con el medio La Política Online— tendría, la vuelven hasta ahora la candidata más fuerte en competencia.
El nuevo líder de la ONU —organismo que este año celebra sus 80 años de existencia—, debiese ser por primera vez una mujer, y latinoamericana, estiman en el mundo diplomático.
Grynspan asumió en 2021 como secretaria general de la Conferencia de Naciones Unidas para el Comercio y Desarrollo.
En este rol evitó confrontar la nueva política tarifaria de Trump. “Nuestra petición es que reconsideren”, dijo. “No es que estemos cuestionando lo que están haciendo, es que (las medidas sobre los países más pobres) no tienen impacto en los objetivos que Estados Unidos se ha fijado para su política comercial”.
Los otros eventuales competidores, de acuerdo con la publicación The interpreter del Lowy Institute de Australia, son la ministra de Medio Ambiente mexicana Alicia Bárcena y el argentino Rafael Grossi, actual director de la agencia internacional de energía atómica.
A ellos se suman la primera ministra y líder del partido laborista de Barbados Mia Mottley, nación aliada de Estados Unidos, y el vicepresidente boliviano David Choquehuanca.