Donald Trump, presidente de Estados Unidos, afirmó recientemente que está “intentando recuperar” la base aérea de Bagram en Afganistán pero las autoridades afganas rechazaron rápidamente la idea, afirmando que no habrá negociación al respecto.
La declaración atrajo amplia atención internacional y generó especulaciones sobre si Estados Unidos tiene la intención de desplegar tropas nuevamente en Afganistán.
Los analistas afirman que restablecer una presencia militar estadounidense completa, especialmente en Bagram, sería extremadamente difícil y actualmente no es viable.
El Wall Street Journal informó que Estados Unidos podría estar negociando con el gobierno afgano una presencia antiterrorista limitada en la base aérea de Bagram.
Zakir Jalaly, director político del Ministerio de Asuntos Exteriores afgano, afirmó que los afganos nunca aceptaron tropas extranjeras en su territorio y que cualquier diálogo con Estados Unidos debe excluir el regreso de militares estadounidenses.
Mohammad Yaqoob Mujahid, ministro de Defensa afgano, declaró a Al Jazeera el jueves que, durante las conversaciones de paz de Doha, previas a la retirada estadounidense, los negociadores estadounidenses solicitaron una base en Afganistán.
“Nuestra respuesta fue: si no se van y quieren bases, estamos dispuestos a luchar contra ustedes durante otros 20 años”
A unos 50 kilómetros al norte de Kabul, la base aérea de Bagram fue el centro de operaciones de Estados Unidos y la OTAN durante dos décadas de guerra.
Con dos pistas de más de 3 kilómetros de longitud, la base tenía capacidad para aviones de combate, bombarderos y transportes pesados.
Los talibanes recuperaron la base en agosto de 2021, después de que las fuerzas lideradas por Estados Unidos abandonaran la base abruptamente durante la noche.
Wang Erfeng, investigador asociado del Centro de Estudios sobre Afganistán de la Universidad de Lanzhou, afirmó que el comentario de Trump refleja su intención de reforzar su imagen de mano dura en política exterior para animar a sus partidarios nacionales, al tiempo que critica lo que considera una retirada apresurada y deficiente de Afganistán por parte del expresidente Joe Biden.
Trump afirmó que “podría ser una noticia de última hora” que “estamos intentando recuperar Bagram”, en declaraciones a la prensa en un encuentro en Gran Bretaña en el que se peleó con periodistas también.
Según informes de prensa, varios funcionarios estadounidenses afirmaron que recuperar Bagram equivaldría a una nueva ocupación de Afganistán, que requeriría decenas de miles de soldados, costosas reparaciones y una compleja cadena de suministro a un lugar aislado en el interior.
El analista político afgano Idris Mohammadi Zazi argumentó que Washington, tras perder la guerra, ha lanzado una nueva “ofensiva de información” para socavar los sistemas político y económico de Afganistán.
En su opinión, la declaración de Trump sobre la recuperación de la base aérea es un espectáculo político y propaganda, no un plan militar viable.
