La Policía de Londres volvió a ser acusada de “racismo sistémico” en un nuevo estudio que analizó su conducta, informaron medios internacionales.
Esta investigación independiente fue encargada después de que un estudio de 2023 concluyera que la Policía Metropolitana es “institucionalmente racista, sexista y homófoba” y advirtió sobre las consecuencias de esos comportamientos, según publica este viernes el sitio RFI.
Este nuevo reporte, de 126 páginas y redactado por Shereen Daniels, reconocida experta en recursos humanos y equidad racial, intenta “evaluar” las dificultades para instaurar reformas en la Policía.
Una serie de escándalos en los últimos años ha mermado la confianza de los ciudadanos en la policía británica, en particular el secuestro, violación y asesinato en 2021 de la londinense Sarah Everard por Wayne Couzens, un agente en servicio.
“No se trata de un recuento de incidentes individuales, sino de un diagnóstico de las estructuras que convierten los prejuicios raciales en un fenómeno recurrente”, señaló Daniels en un comunicado, al presentar el informe “Treinta tipos de perjuicios”.
La Policía Metropolitana declaró en un comunicado que reconoce “la magnitud de los desafíos que plantea” el estudio.
Los antecedentes se remontan, indica el artículo, a 1999 y varios medios entre ellos la BBC, investigaron el tema en profundidad.