Hebe Casado bajó al barro y se ensució las manos

Se presenta como una outsider de la política pero le endilgan los usos y costumbres de la “casta”. La vicegobernadora bajó al barro y lejos de cambiar las reglas del juego, se amoldó a ellas.

POLITICA

No fue una semana sencilla para la vicegobernadora de Mendoza, Hebe Casado. La decisión de denunciar a ciudadanos por criticarla en las redes sociales repercutió a nivel nacional y generó críticas en las filas libertarias a las que se acaba de sumar. Casado afirmó que denunció a usuarios de X por difundir fake news, pero más tarde ella misma reconoció que es cierto que nombró como funcionaria legislativa a una podóloga que cobra un sueldo que supera los 3 millones de pesos. Algo similar sucedió semanas atrás. Luego de que trascendiera que le prometían mercadería a los asistentes de un acto político que ella encabezaba, la vicegobernadora salió a acusar que todo era una “operación” en su contra. 

Las imágenes -publicadas por el portal El Editor- eran elocuentes y mostraban cómo personas confesaban que habían ido al acto político de Hebe Casado a cambio de un bolsón de mercadería. Una de las prácticas clientelares que la propia Casado se cansó de criticarle a otras fuerzas políticas en el pasado.

Pero no es la primera muestra de que la vicegobernadora claudicó en sus intenciones de reformar la política. Lejos de ello ha decidido meterse al fango y adaptarse a las reglas del juego. Lo hizo con las elecciones internas del PRO, lo demostró con la extensa lista de nombramientos en el Senado durante su gestión y también quedó en evidencia con la cuestionada contratación de la empresa que presta el servicio de limpieza en la Cámara Alta.

Cuando todavía estaba pintada de amarillo y profesaba admiración por Mauricio Macri, Hebe Casado peleó por la conducción del PRO. Las internas estuvieron plagadas de denuncias entre la lista que encabezaba la vicegobernadora y la que llevaba como candidato a Gabriel Pradines. Se acusaron de mover gente en micros, presentaron impugnaciones por avales truchos, chicanas administrativas para cambiar la fecha y hasta intentó desconocer el resultado de los comicios. Las viejas mañas de la política dijeron presente en esa oportunidad. 

Una de las personas que integraba la lista de Hebe Casado en las internas amarillas era Nancy Corvalán, podóloga de San Rafael que luego fue nombrada como funcionaria del Senado con funciones en el oasis sur. Se desempeña como asesora en Producción, Presupuesto, Planificación, Enlace y Territorio con funciones de Coordinación en la Zona Sur con clase presupuestaria 8916, la más alta del escalafón. Cobra el 86% del sueldo del gobernador y a pesar de que Hebe Casado al principio negó esa cifra, luego la terminó reconociendo. No era fake news. "Ella es una asesora de la Legislatura y es el enlace que yo tengo con la ciudadanía del Sur de la Provincia", aseguró la vicegobernadora.

Johana y Roxana Stagnoli son dos militantes del PRO que integraban las listas de Hebe Casado en Rivadavia. También son las titulares de la empresa de limpieza Santa Negrita, que fue contratada para prestar el servicio de limpieza del Senado. Sin licitación, la contrataron en enero del 2025 generando sospechas que se reflejaron en pedidos de informes presentados por legisladores de la oposición.

Hebe Casado cambió de partido y se sumó a La Libertad Avanza de la mano de Patricia Bullrich. Pero su desembarco no ha sido armónico y la decisión de callar a los usuarios que la critican en las redes fue cuestionada por twitteros libertarios. 

Pero más allá de las críticas la vicegobernadora avanza y no da indicios de retroceder. No pone excusas y justifica cada una de las decisiones que toma. En definitiva, Hebe Casado se metió al barro de la política.

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