Cajas de ahorro: algunos trámites ya cuestan más de $12.000
Aunque las cuentas básicas no tienen costo de apertura ni mantenimiento, algunos servicios asociados registran comisiones elevadas. La reposición de tarjeta por robo o extravío, el uso de cajeros de otras redes y las operaciones en el exterior figuran entre los más onerosos
Aunque abrir y mantener una caja de ahorro en los principales bancos del país todavía no tiene costo, algunas operaciones asociadas pueden implicar gastos elevados para los usuarios. Según un relevamiento del Banco Central, la reposición de una tarjeta de débito por robo o extravío puede superar los $12.000 en determinadas entidades, mientras que usar un cajero automático en el exterior llega a costar hasta USD 14,88 por transacción.
Los datos surgen del informe actualizado de comisiones publicado por el BCRA, que detalla los costos de los servicios vinculados a las cajas de ahorro en las diez entidades más relevantes del sistema financiero argentino. Entre ellas figuran bancos tradicionales como Nación, Provincia, Galicia y Santander, así como digitales como Ualá y Brubank.
Reposición de tarjeta: hasta $12.500
El caso más llamativo es el del Banco Provincia, que cobra $12.500 por reponer una tarjeta de débito en caso de robo, pérdida o daño. Le siguen Ualá, con una comisión de $9.000, y Naranja X, con $8.833. En tanto, Brubank cobra $8.000 por el mismo trámite, y Galicia, $7.500.
En contraste, los bancos que ofrecen los valores más bajos en este concepto son Credicoop, con $4.235, y Santander, con $4.361. Aun así, se trata de montos significativos si se considera que muchos clientes poseen cajas de ahorro para operaciones básicas y no suelen tener ingresos elevados.
Cabe destacar que, según la normativa del BCRA, todos los bancos deben ofrecer una “Caja de Ahorro en Pesos Gratuita Universal” (CPG), que incluye sin costo la apertura, mantenimiento y provisión de tarjeta de débito. Sin embargo, las comisiones por gestiones como la reposición por pérdida no están reguladas de forma específica, lo que permite que cada entidad fije su valor.
Emisión de tarjeta adicional: solo un banco cobra
Dentro del conjunto de entidades relevadas, sólo el Banco Nación cobra por emitir una tarjeta de débito adicional al titular: $6.899,42. El resto de los bancos ofrece este servicio sin cargo, al menos para el primer ejemplar adicional.
Usar cajeros también cuesta caro
Otro punto a tener en cuenta son las comisiones por el uso de cajeros automáticos fuera de la red habitual del cliente. Si bien operar dentro de los cajeros propios de cada banco sigue siendo gratuito, hacerlo en otra entidad —ya sea dentro de la misma red o en una diferente— puede generar costos de entre $1.800 y $5.000 por operación.
Por ejemplo, el Banco Galicia cobra $5.000 tanto por el uso de cajeros de otra entidad en la misma red como en una red distinta. Santander, en tanto, fija un valor de $3.125 en ambos casos. Credicoop, por su parte, tiene tarifas de $2.758,80 y $3.194,40 respectivamente.
Los valores más bajos corresponden a Banco Macro ($1.869,45 en la misma red y $2.081,20 en otra red) y Banco Nación ($2.292,95 y $2.860,44). No obstante, se trata de montos que pueden sumar una carga significativa si el cliente necesita hacer varias extracciones fuera de su banco habitual.
En el caso de los bancos digitales, los valores son igualmente altos: Naranja X cobra $3.025 en cada caso, mientras que Ualá aplica una tarifa de $3.500 por extracción en otra red, sin distinción.
En el exterior, hasta USD 15 por transacción
El uso de cajeros automáticos en el extranjero también representa un costo relevante para quienes viajan fuera del país. Banco Macro es la entidad que más cobra por esta operación: USD 14,88. Lo siguen Banco Nación (USD 14,52), Brubank (USD 6,05) y Galicia (USD 5.900 al tipo de cambio oficial).
Otros bancos como BBVA (USD 9.500), Naranja X (no disponible) y Ualá (sin datos publicados) también aplican cargos que pueden resultar significativos, especialmente si el cliente necesita hacer varias extracciones durante su viaje.
Comisiones sin topes
Pese a que el BCRA establece algunas pautas sobre la transparencia y la difusión de las comisiones bancarias, no existen topes máximos obligatorios para estos servicios. Cada entidad financiera fija sus propios aranceles y debe informarlos de forma clara a sus clientes. Sin embargo, en la práctica, muchos usuarios no conocen estos costos hasta que los enfrentan.
La falta de regulación en estos conceptos permite que las comisiones crezcan a la par de la inflación o incluso por encima de ella, sin intervención directa del organismo monetario. A esto se suma que, con la digitalización de los servicios y el cierre de sucursales físicas, muchas personas deben recurrir a canales alternativos como cajeros de otras redes, asumiendo cargos adicionales sin muchas opciones.