Tras el manto blanco de una nevada, tus plantas requieren atención específica para recuperarse del frío y la humedad. Descubre los pasos clave para proteger tu jardín y asegurar la vitalidad de tus especies, mitigando los daños del invierno.
Evita fertilizar en exceso inmediatamente después de una nevada, ya que la planta estará estresada; espera a que muestre signos de brotación.. Foto: freepick
La belleza de un jardín cubierto de nieve es innegable, pero tras el espectáculo invernal, las plantas necesitan cuidados especiales para recuperarse de la exposición al frío extremo, el peso de la nieve y la humedad persistente. Actuar a tiempo y de manera correcta es crucial para minimizar los daños y asegurar su vitalidad. Conocer los cuidados post-nevada es fundamental para la supervivencia de tu flora.
El primer paso, y el más inmediato, es retirar suavemente el exceso de nieve de las ramas de árboles y arbustos, especialmente de aquellos con hojas perennes o estructuras más frágiles. Usa una escoba suave o un palo, empujando la nieve hacia arriba con movimientos delicados para evitar quebrar las ramas, que suelen estar más quebradizas por el frío. Es importante no sacudir con fuerza, ya que esto podría romper el follaje y las ramas congeladas.
Una vez que la nieve comienza a derretirse, es vital inspeccionar las plantas en busca de daños visibles. No te apresures a podar de inmediato. Espera a que las temperaturas se estabilicen y que la planta no esté congelada. Esto permitirá ver con claridad qué partes están realmente dañadas o muertas. La poda debe realizarse con herramientas limpias y afiladas, eliminando ramas rotas, agrietadas o con signos evidentes de congelación para evitar la propagación de enfermedades y estimular el nuevo crecimiento.
Evita fertilizar en exceso inmediatamente después de una nevada, ya que la planta estará estresada; espera a que muestre signos de brotación.
El riego es otro factor crucial. Aunque el suelo pueda parecer húmedo por la nieve derretida, las raíces podrían estar secas si la capa de hielo impidió la penetración del agua. Una vez que el suelo se descongele, verifica su humedad y riega si es necesario, especialmente a las plantas de maceta. Considera aplicar una capa de mulch o acolchado orgánico alrededor de la base de las plantas. Esto ayudará a regular la temperatura del suelo, protegerá las raíces de futuras heladas y aportará nutrientes a medida que se descomponga.
Finalmente, mantén una vigilancia constante durante las semanas siguientes. Algunas plantas pueden tardar en mostrar signos de recuperación. Evita fertilizar en exceso inmediatamente después de una nevada, ya que la planta estará estresada; espera a que muestre signos de brotación. Al seguir estos cuidados con las plantas después de una nevada, les brindarás la mejor oportunidad para recuperarse y florecer nuevamente en tu jardín.