Minería

San Jorge: aspectos sociales y económicos del informe de la UNCuyo

La Fundación de la casa de estudios presentó el estudio sobre el Proyecto de la minera, realiza varias observaciones hídricas, técnicas y de salud, entre otras. Dudas sobre cuánto empleo se creará.
domingo, 11 de mayo de 2025 · 07:16

El informe técnico presentado por la Fundación UNCuyo sobre el proyecto minero de Uspallata llevado a cabo por San Jorge, indica, entre otras cosas, que es necesario realizar un balance hídrico unificado; que no se tiene en cuenta posibles disminuciones del caudal del Arroyo El Tigre ocasionadas por el cambio climático para el abastecimiento de agua. En cuanto a la rentabilidad social del proyecto declarada, sería importante especificar los supuestos empleados en la estimación del flujo de fondos, así como aclarar si se han considerado todos los costos asociados al proyecto y de qué manera han sido valorados en términos monetarios; advierte que los potenciales impactos a nivel de actividad económica y de empleo, dependen en gran medida de la capacidad local (provincial) de dar respuesta a las necesidades del proyecto en cuanto a calificación de la oferta laboral y provisión de bienes y servicios requeridos; que faltan instancias de participación con la comunidad y que no se aborda el conflicto socioambiental que el proyecto ha generado en la historia reciente.

En las consideraciones generales desarrollan 10 puntos: recurso hídrico; geología, hidrogeología y geomorfología; biodiversidad; ordenamiento territorial/infraestructura; componente social; componente económico; componente técnico; patrimonio arqueológico y paleontológico; componente salud pública y finalmente el componente escenarios prospectivo.

Por su extensión, el informe tiene 187 páginas, en esta nota nos enfocaremos en el aspecto hídrico, económico, social, técnico, biodiversidad y de salud. Podrán ver el informe completo al final de la nota en formato PDF.

Con relación al aspecto hídrico los técnicos de la UNCuyo indicaron lo siguiente:

-Se identifica una heterogeneidad en los estudios de balance hídrico presentados, lo que impide una evaluación integral del impacto del proyecto sobre la calidad y disponibilidad del recurso hídrico en la cuenca. Se recomienda la elaboración de un balance hídrico unificado que considere la dinámica atmosférica específica del Valle de Uspallata y las series históricas de datos de las estaciones meteorológicas regionales, recalculando parámetros críticos como la tormenta TR100. Resulta necesario rever la metodología y los datos utilizados en el análisis del régimen pluvial y nival, la validez de las extrapolaciones de precipitación, y la representatividad de los datos de caudal del Arroyo El Tigre debido a su corto periodo de registro (2008-2010) que no refleja la variabilidad a largo plazo. Se recomienda la actualización y continuidad del monitoreo hidrológico con un programa de aforos sistemático y representativo, incluyendo la instalación de aforadores en el Arroyo El Tigre, que permita cuantificar de manera precisa y confiable, los consumos de agua de la empresa, el caudal ecológico y las disminuciones de las recargas del sistema subterráneo.

-Si bien no se prevé una extracción del recurso hídrico subterráneo a través de una instalación de bombeo, el uso y derivación del agua del arroyo para las tareas operativas de la planta afecta de manera directa la recarga del sistema hidrológico. Se recomienda entonces reevaluar el impacto sobre los niveles de agua subterránea.

-La documentación presentada sobre la conexión hidrogeológica entre las cuencas de Yalguaraz y Uspallata, así como la definición de las divisorias de aguas subterráneas no es determinante. Se sugiere continuidad en el monitoreo que aporte datos empíricos, estudios geofísicos, perforaciones y análisis hidroquímicos para validar la existencia y continuidad de fracturas y evaluar posibles conexiones entre subcuencas en el marco del plan de vigilancia ambiental del proyecto. Se sugiere redefinir las áreas de influencia directa e indirecta del proyecto, incluyendo la Ciénaga de Yalguaraz como área de influencia de la hidrología superficial y subterránea. Se recomienda la instalación de piezómetros estratégicos y el desarrollo de una modelación hidrogeológica numérica para evaluar la relación entre el arroyo y el acuífero, proyectando posibles impactos en el marco del plan de vigilancia ambiental del proyecto.

-En referencia a la modelación presentada, se observan deficiencias en los datos de entrada de los modelos numéricos, como la conductividad hidráulica del suelo, tasas de evaporación y tasas de evapotranspiración. Se recomienda utilizar valores obtenidos de ensayos in situ y detallar la metodología de medición de la evaporación considerando las características del material de las colas. Es necesario modelar la posible migración de contaminantes por un periodo más extenso que la vida útil de la mina y detallar los datos de precipitación utilizados en los modelos.

-Resulta relevante realizar estudios geoeléctricos en la zona de las colas para comprender mejor la profundidad freática.

-Los estudios de DAR presentan insuficiente número de muestras y falta de detalle en el procedimiento de toma de muestra. La clasificación del material como "incierto productor de ácido" exige la aplicación del principio precautorio y la implementación de medidas de prevención y mitigación. Se recomienda reevaluar la potencial formación de DAR en el depósito de colas, como asimismo complementar el análisis con métodos más detallados, como DRASTIC o SINTACS, para incluir factores clave como recarga, topografía, conductividad hidráulica, entre otras.

-Respecto al consumo de agua por parte de la empresa se menciona que la evaluación del impacto se basa en cálculos de caudales del Arroyo El Tigre que requieren actualización. Esto dificulta una cuantificación precisa de los efectos sobre el recurso hídrico. Asimismo, la variable de extensión del impacto debería considerar la afectación al sector de la ciénaga, debido a que existe una conexión hidráulica entre ésta y el Arroyo El Tigre. Se debe establecer una metodología clara para definir el caudal ecológico y asegura su cumplimiento en el tiempo, para garantizar el mantenimiento de las funciones ecosistémicas del arroyo y la conservación del sistema hidrológico en su totalidad.

-El proponente ha declarado la construcción de un nuevo aforador en el cauce del arroyo El Tigre, en el mismo sitio donde se encuentra el aforador fuera de servicio. Sin embargo, este nuevo aforador estará ubicado aguas abajo de la toma de agua que abastece a la planta de procesos. Para asegurar un monitoreo efectivo, se recomienda la instalación de un aforador adicional aguas arriba de la toma de agua, en un sector no influenciado por las obras de captación. Esto permitirá obtener un punto de referencia que refleje las condiciones naturales del arroyo y mejorar la evaluación del impacto de la captación sobre el régimen de caudales aguas abajo.

-Debido a que los procesos geoquímicos en el agua subterránea tienen una cinética lenta, es fundamental prolongar el monitoreo durante la etapa post-cierre. Esto permitirá identificar posibles efectos tardíos en la calidad y disponibilidad del recurso hídrico, así como implementar medidas correctivas oportunas en caso de ser necesario. Asimismo, se recomienda reevaluar los planes de manejo y mitigación para garantizar que sean elaborados a partir de estudios unificados, datos representativos y modelos validados, asegurando así la protección de los recursos hídricos y los ecosistemas asociados en la región.

Antes de llegar a estas conclusiones los técnicos habían señalado que actualmente, el agua (superficial y subterránea) no se encuentra en uso. Si se considera que el proyecto utilizará agua superficial y no subterránea (0005-IF-2025, pág. 169), se requieren estudios adicionales para caracterizar con mayor precisión las cuencas subterráneas en caso de verse afectadas por infiltraciones derivadas del proyecto o por una posible disminución de las tasas de recarga. Existen contradicciones hidrológicas e hidrogeológicas en la delimitación de la divisoria de cuencas.

También destacaron que no se tiene en cuenta posibles disminuciones del caudal del Arroyo El Tigre ocasionadas por el cambio climático para el abastecimiento de agua. Tampoco aclara si el agua para consumo humano es para bebida o solo uso sanitario y la capacidad de las mismas es para 600 personas y sería insuficiente para la totalidad del personal indicado. Se debería incorporar el consumo de agua en la etapa de molienda indicando si se agrega fluido para continuar el circuito hacia los hidrociclones o si la molienda húmeda tiene la cantidad suficiente de agua como para proceder a la etapa de clasificación de tamaño.

No asegura que el reciclado de agua sea de la calidad requerida por el proceso. No especifica tratamientos intermedios para el reúso ni los correspondientes a aguas de uso industrial provenientes del arroyo. No se ha detallado si el proceso de molienda que sigue a las etapas de trituración, se realizará en húmedo o en seco (improbable si posteriormente se realizará el control de tamaño con hidrociclones), al no mencionarlo, no es posible inferir que el balance hídrico sea correcto.

En el componente Económico se explica lo siguiente:

-Se omiten períodos de tiempo y variables que no sólo mejorarían la descripción del estado actual, sino que además facilitarían la comparación con la situación final; es decir, con proyecto. No se observa una conexión congruente entre la descripción de la Línea de Base, los aportes del proyecto y los impactos observados en la situación con proyecto.

-En cuanto a la rentabilidad social del proyecto declarada, sería importante especificar los supuestos empleados en la estimación del flujo de fondos, así como aclarar si se han considerado todos los costos asociados al proyecto y de qué manera han sido valorados en términos monetarios. En particular, no queda claro si en el cálculo del Valor Actual Neto (VAN) y la Tasa Interna de Retorno (TIR) se han tenido en cuenta las externalidades ambientales. No se aclara cómo se han integrado estas externalidades en los análisis de rentabilidad, ni de qué manera se han considerado sus impactos a corto, mediano y largo plazo en el bienestar social.

En caso de haber sido consideradas, falta información sobre los métodos de valoración económica empleados para inferir en términos monetarios los cambios en el bienestar social. Es fundamental que tanto los costos como los beneficios sean correctamente evaluados y reflejados en los indicadores financieros, dado el impacto directo que tienen sobre la sostenibilidad del proyecto y el bienestar de las personas.

-Se advierte que los potenciales impactos a nivel de actividad económica y de empleo, dependen en gran medida de la capacidad local (provincial) de dar respuesta a las necesidades del proyecto en cuanto a calificación de la oferta laboral y provisión de bienes y servicios requeridos.

En el componente Social agregan que:

-La falta de instancias participativas con la comunidad de Uspallata para conocer las diferentes percepciones de actores locales en relación al proyecto, llevan a suponer que se mantiene desconexión y distancia con la comunidad local.

-En la línea de base no se aborda el conflicto socioambiental que el proyecto ha generado en la historia reciente. Este es un aspecto que el IIA necesariamente tiene que diagnosticar, evaluar los impactos que puede ocasionar y planificar medidas que permitan gestionarlos.

-No se ha abordado de manera particular la consulta a las comunidades indígenas para asegurar el resguardo de sus derechos y la participación en la planificación de las acciones del mismo

-No se percibe una vinculación del proyecto con las dinámicas sociales que permita evaluar los efectos del mismo al desarrollo comunitario y territorial sustentable. Este abordaje podría derivar en un proyecto de enclave, donde se supone un crecimiento repentino de población, desarrollo de aspectos específicos necesarios para la explotación minera y un cierre con un restablecimiento de las condiciones sociales previas al inicio del proyecto, sin contemplar la articulación con los grupos sociales y con las estrategias de desarrollo existentes en la zona. En este sentido, se recomienda adecuar el IIA a los requisitos de la Res. 192/2024 de la Dirección de Minería.

-En términos generales falta identificar impactos sociales relacionados a aspectos de: (i) género y afectación a grupos vulnerables, (ii) generación de empleo, (iii) condiciones laborales de los trabajadores, (iv) salud y seguridad de la población y los trabajadores, (v) afectación socio productiva vinculado a la presencia de puesteros, (vi) derechos y cultura de los pueblos indígenas.

En el componente Salud pública se señala:

-Ante la existencia de información disponible y documentada en revistas científicas internacionales en torno a los posibles efectos toxicológicos de los diferentes productos químicos propuestos para la extracción de cobre y, como la certeza en cuanto al riesgo de afectación a la salud es relevante para la viabilidad del proyecto, es que se sugiere, que en caso de no aplicación de una sistema que garantice el aislamiento de depósitos de colas, mineral de baja ley y escombros; resulta necesario ampliar el análisis con información en el marco de una evaluación de riesgo ambiental, tal como se lista en la observación Nº22 de la tabla 2 de este DT/salud pública.

-Incluir en el PMA de la empresa un Programa de Monitoreo de Salud Ambiental que incluya el seguimiento continuo de variables para los umbrales de alerta.

Y en biodiversidad se considera necesario mejorar la evaluación espacial de la flora y fauna y los efectos de las operaciones, presentando una correcta relación entre los censos, los mapas de vegetación y fauna, y la ubicación de las operaciones. Se sugiere contextualizar la cobertura de cada unidad ambiental en relación con las áreas adyacentes y las unidades protegidas del área de influencia para valorar mejor los impactos a nivel regional. Se recomienda incorporar un análisis integral y detallado de la Ciénaga de Yalguaraz por su importancia ecosistémica y su potencial afectación por la intervención en el Arroyo El Tigre. Se exige aportar los datos y pasos intermedios para la valoración de indicadores clave como el cálculo del caudal ecológico y el mapa de vegetación.

En el componente técnico se indica:

-Las cantidades e instancias del proceso en la que se utilizarán aditivos para las operaciones de flotación y espesamiento no se especifican con claridad. Se debería analizar la posible formación de contaminantes secundarios a partir de la descomposición de estos productos y su posible influencia en el entorno.

-La determinación de la potencial formación de Drenajes Ácidos de Roca (DAR) se basa en el análisis de una cantidad de muestras insuficientes y sus resultados no son concluyentes. En efecto, se analizaron 8 muestras puntuales, de las cuales 7 fueron categorizadas como “incierto productor de ácido”. Se recomienda ampliar la cantidad de muestras analizadas. En caso de no ser posible descartar fehacientemente la potencial formación de DAR, se sugiere diseñar y construir sistemas de aislación de los depósitos con sus respectivos colectores de lixiviados.

-El balance de aguas del proceso es poco preciso. Se recomienda reevaluar la disponibilidad de agua para el proceso desde el Arroyo El Tigre, tomando las consideraciones especificadas en el componente de recursos hídricos.

-Las metodologías de cálculo y los inputs utilizados para realizar los estudios de estabilidad de depósitos de colas, baja ley y escombros no se describen con claridad. Una situación similar sucede con el Estudio de Rotura de Presa de la pila de colas. Se sugiere reevaluar dichos cálculos a partir de datos obtenidos mediante ensayos documentados.

-En relación a los análisis de la composición de las colas y sus lixiviados, es recomendable verificar si las mismas pueden ser categorizadas como residuos peligrosos. Se recomienda verificar el cumplimiento de los parámetros establecidos en el Anexo 2 (Calidad de Suelos) y Anexo 6 (Barros) del Decreto reglamentario 831/94 de la Ley 24051 (Residuos Peligrosos) a fin de ser o no contemplados en el Plan de Manejo Ambiental y los monitoreos de vigilancia ambiental.

-Se sugiere ampliar la descripción de instalaciones civiles y de infraestructura (construcciones, caminos, etc.) detallando las acciones a seguir para su ejecución.

-Se han realizado observaciones al Plan de Contingencias presentado, específicamente acerca de los siniestros viales (en caminos desde Uspallata a la Planta y en la RN7), para el traslado de concentrado y de cada insumo químico, así como el aprovisionamiento de combustibles y explosivos ya que estas emergencias no se encuentran identificadas, valoradas y, por ende, no cuentan con protocolos de actuación.

-Se recomienda profundizar y modelizar la carga de tránsito en todo el corredor internacional, desde zona metropolitana o inicio del corredor internacional hasta límite con la República de Chile, en toda la traza afectada por el proyecto, para todas las etapas del mismo.

En el componente Ordenamiento Territorial se destaca la importancia de prever la demanda de infraestructura y equipamiento social en la Villa de Uspallata, tanto en etapas de construcción como de funcionamiento. La previsión de estas demandas tendrán su correlato en el uso de suelo, producto de la llegada de nuevos pobladores, nuevas actividades económicas, entre otros.

El componente de Escenarios Prospectivos se proponen iniciativas como un Observatorio participativo (empresa-sociedad) para mantener actualizada la línea de base social y un Observatorio de Salud Ambiental interinstitucional. Se destaca la necesidad de generar espacios convergentes para la interpretación del presente y el diseño de futuros sostenibles en un contexto de crisis climática. Se adjunta un informe con la simulación de tres escenarios posibles al año 2050, basado en datos del IIA y tendencias.

En las conclusiones y recomendaciones los técnicos de la Fundación UNCuyo señalan que el Informe de Impacto Ambiental presentado por Minera San Jorge S.A. en general cumple parcialmente con lo solicitado por el Artículo 4 del Decreto 820/06 de la Provincia de Mendoza y piden cumplir con las sugerencias indicadas en el informe de la casa de estudios. Por su parte San Jorge presentó un informe de 217 páginas.

 

UNC San Jorge by gabriela guillo