A través de un comunicado y a dos días de que el Senado trate la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto San Jorge, la Mesa de Diálogo formada en nuestra provincia e integrada por la Pastoral Social de Mendoza, la Comunidad Huarpe Guaytamari de Uspallata, la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Uspallata, la Fundación Cullunche, los Autoconvocados por el cuidado de la Casa Común, Epicentro Asociación Civil, la Asamblea por Necesidad y Urgencia, la Asamblea de Las Heras Por el Agua Pura, la Asamblea Popular por el Agua, Grupo GAIA y el Instituto de Capacitación Popular (ICP); indicaron que "Nuestra visión de mundo y nuestras convicciones éticas, no nos permiten mantenernos indiferentes frente al modo en que se pretende que se apruebe la Declaración de Impacto Ambiental (DIA). Una DIA “condicionada” (o sea con vacíos y vicios, elementos mal consignados, observaciones no contestadas y “con promesas a futuro”) es ilegal e ilegítima, toda vez que se violan los fundamentos mismos con los cuales este proceso fue concebido".

Agregan que "se desconocen el Principio Precautorio y el de Equidad Intergeneracional, se falsea el pretendido apoyo mayoritario de la población -en general- y el de los Pueblos Originarios de Uspallata, en particular" y señalan también que "no se han tenido en cuenta importantes observaciones de los informes científicos del CCT-CONICET, de la Fundación UNCUYO, del Departamento General de Irrigación, etc. Se prometen fuertes controles ambientales en aquellas latitudes, cuando tenemos la experiencia de que mucho más cerca, en núcleos urbanos muy habitados, no se pueden controlar procesos más elementales".

Destacan que "muy dolorosamente, se ha verificado la persecución de voces críticas independientes y la judicialización y penalización de la protesta social" y es que "frente al grave conflicto socioambiental que se genera, rechazamos proyectos que atentan contra derechos fundamentales e inalienables de la persona y su dignidad: la vida, la salud, el ambiente sano, la unidad de la familia y la comunidad en donde se vive, así como el derecho a permanecer en el propio territorio".

Explican que "el agua, bien común insustituible, vital y tan escaso en Mendoza, NO debe ser desviada para este tipo de actividad extractiva. Además de usarse grandes cantidades, se contamina, resultando también afectados el aire y la tierra, lo cual causa el deterioro de las diversas formas de vida. Todos debemos cuidar la paz social de los pueblos".
"Por lo expuesto, entonces, exhortamos a nuestros legisladores a que escuchen el clamor: El AGUA vale más que el oro, el AGUA es VIDA".
Cierran el texto indicando que "el amor, que es lo contrario a la manipulación y a la indiferencia, nos exige expresarnos: SÍ al ÁREA NATURAL PROTEGIDA USPALLATA-POLVAREDAS, SÍ A LA VIDA, SÍ AL CUIDADO DE LA CASA COMÚN, SÍ AL BUEN VIVIR, SÍ A LA JUSTICIA AMBIENTAL, SÍ A LA PROTECCION DE LOS BIENES COMUNES NATURALES, SÍ A LA PRESERVACIÓN DE LA LEY DE GLACIARES y SÍ A CAMINAR JUNTOS EN LA CONSTRUCCIÓN COMUNITARIA Y SOBERANA DE NUESTRO DESTINO"