La viceprimera ministra británica, Ángela Rayner, renunció tras un escándalo relacionado con el impuesto a la propiedad, informaron medios locales este viernes.
Rayner, quien también se desempeñó como secretaria de Vivienda, dimitió tras no pagar 40.000 libras (unos 53.900 dólares estadounidenses) en concepto de impuesto de timbre sobre su segunda vivienda.
Rayner renunció debido a una investigación sobre sus asuntos financieros personales, específicamente "un error en el pago del Impuesto de Timbres (SDLT)". La ex funcionaria reconoció toda la responsabilidad, aunque aclaró que un asesor independiente concluyó que no actuó con mala fe ni con intención de evadir impuestos.