El ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, afirmó este miércoles que se encuentra en negociaciones con empresas estadounidenses para dividir el enclave costero de la Franja de Gaza una vez que finalice la guerra. “Es una mina de oro inmobiliaria”, sostuvo en una cumbre de regeneración urbana.
El funcionario de extrema derecha aseguró que la reconstrucción de Gaza podría convertirse en una inversión rentable. Además, dijo que tiene una visión “utópica” y un “plan de negocios” que fue elaborado por profesionales. Ese plan, afirmó, ya se encuentra en manos del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
“Pagamos mucho dinero por esta guerra. Tenemos que ver cómo dividimos el terreno en porcentajes. La demolición, la primera etapa de la renovación de la ciudad, ya la hemos hecho. Ahora tenemos que construir”, detalló, según reportó el diario The Times of Israel.

Y agregó: “Hay un plan de negocios desarrollados por las personas más profesionales en este lugar y está en el escritorio del presidente Trump”.
No es la primera vez que el ministro de Finanzas realiza declaraciones de esta índole. El mes pasado, en una entrevista con el newsletter de fin de semana Ofek de su partido sionista religioso, Smotrich dijo que estaba trabajando para restablecer los antiguos asentamientos israelíes de Ganim y Kadim.
En julio, durante una conferencia sobre Gaza, aseguró que la franja se iba a convertir en “una parte inseparable del Estado de Israel”. También sostuvo que su visión tenía el apoyo de Trump, quien en febrero dijo que Estados Unidos iba a tomar el control de Gaza, relocalizar a los palestinos, y convertirla en la “Riviera del Medio Oriente”. Su mirada fue rechazada por la mayoría de la comunidad internacional.
Las declaraciones de este miércoles de Smotrich ocurren en un tenso contexto para Israel, donde la Unión Europea presentó su plan más duro hasta la fecha para presionar al Estado judío a poner fin a la guerra.
La jefe política exterior de la UE, Kaja Kallas, instó a las 27 naciones miembro a aumentar los aranceles sobre algunos productos israelíes e imponer sanciones a diez líderes de Hamas, colonos israelíes y dos miembros del gabinete del primer ministro Benjamin Netanyahu -el ministro de Seguridad Nacional Itamar Ben-Gvir y Smotrich.
“Estamos proponiendo estas medidas no para castigar a Israel o a su pueblo, sino para realmente intentar presionar al gobierno israelí a cambiar de rumbo y poner fin al sufrimiento humano en Gaza”, señaló Kallas.
Y añadió: “La guerra debe terminar, el sufrimiento debe cesar y todos los rehenes deben ser liberados”. Las sanciones implicarían el congelamiento de los activos europeos delos individuos y la prohibición de viajar dentro de la Unión Europea.