La devastada Franja de Gaza ha registrado la muerte de al menos 45 personas desde la pasada noche, producto de nuevdoos bombardeos israelíes. Los ataques impactaron directamente en dos escuelas que funcionaban como refugios para desplazas, además de otros puntos en el norte y centro del enclave palestino.
Fuentes médicas confirmaron a EFE que la escuela de Al Hurriya, en el barrio de Zeitún de Ciudad de Gaza, sufrió un ataque israelí que dejó al menos cuatro fallecidos. En la misma urbe, la escuela de Zainba también fue bombardeada, resultando en la muerte de otras cuatro personas. Se reportaron ataques contra otras tres escuelas en la capital gazatí; si bien Al Falah y Yafa recibieron aviso previo y no registraron víctimas, la escuela Fahd Al Sabah fue impactada sin advertencia, dejando varios heridos.
La intensidad de los ataques en el norte de la Franja se ha incrementado en las últimas horas, tras una orden de evacuación forzosa emitida por el Ejército israelí para residentes de barrios de Ciudad de Gaza y Yabalia. En este contexto, siete gazatíes perdieron la vida en un bombardeo contra un grupo de civiles en el campamento de refugiados de Al Shati, y diecisiete más murieron tras un ataque a dos viviendas en Yabalia.
Particularmente alarmante es la situación en los puntos de reparto de ayuda. El Hospital Al Awda, en el campamento de Nuseirat, confirmó un fallecido y más de veinte heridos en un ataque mientras esperaban comida en Wadi Gaza. Además, otras dos personas murieron y diez resultaron heridas en un ataque a un punto de reparto de la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF) en Rafah, y diez más fallecieron tras un ataque a un almacén de distribución de alimentos en Zeitún. Testigos locales también denunciaron que un mercenario estadounidense disparó a un joven gazatí en un punto de distribución en Netzarim. Desde la implementación del modelo de distribución con contratistas de la GHF (respaldado por Israel y EE.UU. a fines de mayo), más de 580 gazatíes han muerto y cerca de 4.200 han resultado heridos en estos lugares.
El Gobierno gazatí ha denunciado que, desde el inicio de la ofensiva israelí hace más de 20 meses, las tropas de Israel han atacado 256 centros de acogida, la mayoría escuelas, donde se refugiaban más de 700.000 desplazados. Solo en junio, se reportaron ataques deliberados contra 11 de estos centros. Las autoridades del enclave han hecho un llamamiento urgente a la comunidad internacional, al Consejo de Seguridad y a todos los países para que detengan lo que califican como un "crimen de genocidio", levanten el asedio a Gaza y apoyen la reconstrucción de las infraestructuras vitales destruidas.
