El papa León XIV se reunió por primera vez este jueves con el presidente palestino, Mahmud Abbas, en un contexto humanitario aún precario en Gaza, casi un mes después de que se iniciara una tregua entre Israel y Hamás en ese territorio devastado por la guerra.
El líder palestino llegó a media mañana al Vaticano para una audiencia privada en el palacio apostólico, la primera en persona desde la elección del pontífice estadounidense-peruano en mayo. Ambos habían mantenido una conversación telefónica en julio, indicó el portal RFI.
El Papa y Abbas coincidieron en la urgente necesidad de proporcionar asistencia humanitaria inmediata y en la importancia de trabajar para el fin de las hostilidades, reafirmando la relevancia de la solución de dos Estados como camino viable para alcanzar una paz duradera en la región, según Vatican News.

El Vaticano reiteró su compromiso con la justicia, el diálogo y la dignidad de todas las personas afectadas por el conflicto, subrayando su disposición a continuar promoviendo iniciativas diplomáticas que favorezcan el entendimiento entre los pueblos.
La reunión se realizó en el marco del décimo aniversario del histórico Acuerdo Global firmado entre la Santa Sede y Palestina el 26 de junio de 2015.
La solución de dos Estados como camino viable es la posición oficial de la Santa Sede, reiterada en varias ocasiones por el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, y antes aún por el Papa Francisco y ahora por el Papa León, recordó Vatican News.
El pontífice, el martes por la noche, respondiendo a las preguntas de los periodistas frente a su residencia en Castel Gandolfo, destacó la fragilidad de la tregua en Gaza y de la cuestión de los colonos en Cisjordania. “Gracias a Dios —añadía— al menos la primera fase del Acuerdo de paz sigue adelante”. Ahora, sin embargo, “es necesario buscar cómo pasar a la segunda fase, ver el tema del gobierno, cómo se pueden garantizar los derechos de todos los pueblos”.
El miércoles, poco después de su llegada a la capital italiana, Abbas se dirigió a la basílica de Santa María la Mayor para rezar ante la tumba del papa Francisco, fallecido en abril, y depositar flores.
“He venido a verlo porque no puedo olvidar lo que hizo por el pueblo palestino”, dijo a los periodistas, refiriéndose al pontífice argentino.