Un trabajador que había sido rescatado de los escombros de la Torre dei Conti falleció en el hospital. El hombre, identificado como Octay Stroici, de 66 años y de nacionalidad rumana, se encontraba realizando tareas de restauración en el torre medieval cuando parte de su interior y una sección de la fachada colapsaron.
Una agonizante labor de rescate y el trágico final
El derrumbe, ocurrido el lunes, provocó una densa nube de humo blanco y dejó una gran cantidad de escombros en la calle, cerca de importantes sitios turísticos como el Foro Imperial y el Coliseo. Stroici quedó atrapado bajo los restos de la estructura, desatando una intensa operación de rescate que involucró a aproximadamente 140 bomberos.
El trabajador se mantuvo consciente durante las más de 11 horas que duró la compleja maniobra de rescate, según reportó el Ministerio de Relaciones Exteriores rumano. Sin embargo, su estado era crítico al ser liberado.
Lamentablemente, Stroici sufrió un paro cardiorrespiratorio al ingresar a la ambulancia. Aunque los equipos de emergencia lograron estabilizarlo y fue trasladado de urgencia al hospital Umberto I, el daño era irreversible. Fuentes del hospital informaron a la agencia noticiosa Ansa que, pese a los intentos de reanimación que duraron más de una hora, la actividad cardíaca espontánea no pudo ser restaurada. Su muerte fue declarada a las 00:20 (hora local del martes).
Otras víctimas y la investigación en curso
La Torre dei Conti, que data de principios del siglo XIII, estaba siendo restaurada con fondos de la Unión Europea. La tragedia ocurrió en una zona de alto tránsito, lo que generó gran conmoción en la capital italiana.
Otros tres trabajadores que se encontraban dentro del monumento lograron ser evacuados, aunque uno de ellos también fue trasladado al hospital en estado crítico. Un reportero de la AFP presenció incluso un segundo colapso parcial en la torre durante la tarde del lunes.
Uno de los obreros evacuados, quien se identificó como Ottaviano (67 años), y que logró escapar por un balcón, expresó su temor: "No era seguro. Solo quiero irme a casa". El alcalde de Roma y el ministro de Cultura de Italia, Alessandro Giuli, acudieron al lugar del siniestro mientras los bomberos acordonaban la zona e inspeccionaban la estructura con grúas y drones.
Las autoridades han iniciado la investigación correspondiente para determinar las causas exactas del derrumbe que cobró la vida del ciudadano rumano Octay Stroici.
