Tenés que probarlo

El poder del bicarbonato que mantendrá los paños de tu cocina relucientes

Mantener y lavar tus paños de cocina blancos para que luzcan impecables no tiene por qué ser una batalla constante. Con la ayuda del económico y efectivo bicarbonato de sodio, puedes desterrar las manchas.
viernes, 9 de mayo de 2025 · 13:01

Los paños de cocina o repasadores son héroes silenciosos, siempre listos para secar derrames, limpiar mesadas y manipular utensilios calientes. Sin embargo, su blancura puede verse amenazada por manchas rebeldes de grasa, salsas, café y otros accidentes culinarios. Mantener y lavar los paños de cocina blancos para que luzcan como nuevos puede parecer una tarea ardua, pero con el aliado adecuado – el versátil bicarbonato de sodio – lograr resultados sorprendentes es más sencillo de lo que imaginas.

El bicarbonato de sodio es mucho más que un simple agente leudante. Sus propiedades alcalinas suaves, su capacidad abrasiva delicada y su poder desodorizante lo convierten en un campeón natural para el cuidado de tus paños de cocina. A continuación, te presentamos una guía completa sobre cómo aprovechar al máximo el bicarbonato de sodio en el mantenimiento y lavado de estos imprescindibles textiles.

Mantenimiento diario para una blancura duradera:

La clave para evitar que las manchas se incrusten permanentemente en tus repasadores reside en un mantenimiento diario diligente. Inmediatamente después de un derrame o de utilizar un paño, enjuágalo bajo agua fría para eliminar la mayor cantidad posible de residuos. Evita el agua caliente en esta etapa inicial, ya que puede fijar algunas manchas proteicas.

Para manchas leves o para refrescar los paños después de un uso, puedes preparar una solución suave de agua tibia y una cucharada de bicarbonato de sodio. Remoja el paño en esta solución durante unos minutos antes de enjuagarlo. El bicarbonato de sodio ayudará a neutralizar olores y a prevenir la aparición de manchas más difíciles.

El bicarbonato como pretratamiento

Cuando te enfrentes a manchas más persistentes en tus paños de cocina, el bicarbonato de sodio se convierte en tu arma secreta. Crea una pasta espesa mezclando bicarbonato con una pequeña cantidad de agua hasta obtener una consistencia similar a la de una crema dental. Aplica esta pasta directamente sobre la mancha, asegurándote de cubrirla por completo. Deja que la pasta actúe durante al menos 30 minutos, o incluso durante varias horas para manchas particularmente rebeldes.

El bicarbonato actuará penetrando en las fibras del tejido y ayudando a descomponer las moléculas de la mancha, facilitando su eliminación durante el lavado posterior. Para manchas de grasa, el bicarbonato actuará como un absorbente natural, extrayendo parte de la grasa del tejido.