La madrugada del domingo, el mundo del cine se despertó con una noticia que sacudió los cimientos de Hollywood: el aclamado director Rob Reiner, conocido por clásicos como Cuando Harry conoció a Sally (1989), y su esposa, la fotógrafa Michele Singer, fueron hallados sin vida en su casa del oeste de Los Ángeles.
La Policía de Los Ángeles (LAPD) acudió al domicilio alrededor de las 15:30 del domingo tras recibir un llamado de auxilio. Al ingresar, los agentes encontraron los cuerpos de un hombre de 78 años y una mujer de 68 años con heridas de arma blanca, según reportó el medio TMZ.
El giro sombrío: el hijo de la pareja bajo la lupa
Las primeras investigaciones de la policía y fuentes cercanas a la pareja han puesto en el centro de la escena a Nick Reiner, uno de los tres hijos del matrimonio, como el principal sospechoso del doble homicidio, según reveló la revista People.
El supuesto parricidio genera gran consternación en la industria, dado el historial personal del joven. Nick Reiner ha mantenido una larga y pública lucha contra la adicción a las drogas, una batalla que lo había llevado a enfrentar momentos de indigencia.
Una historia de amor marcada por el cine
El romance entre Rob Reiner y Michele Singer comenzó precisamente durante la producción de su película más icónica, Cuando Harry conoció a Sally.
Este amor influyó directamente en la obra del director: Reiner cambió el final original del guion, donde los protagonistas se separaban, para dar a la película el final feliz que terminó catapultándola a la fama. La pareja se casó ese mismo año, en 1989, y tuvo tres hijos.
La LAPD ha iniciado una investigación formal para esclarecer los detalles de la tragedia que enluta al cine estadounidense.