El experimentado delantero Julio Furch, con más de 150 goles entre el fútbol argentino, mexicano y brasileño, decidió volver a Deportivo Winifreda, de La Pampa, el club de su juventud, antes de retirarse de la actividad.

Furch ya se encontraba entrenando con el conjunto de La Pampa y representó “un gran esfuerzo” para su dirigencia, que lo considera “el punto de partida de un proyecto que busca revitalizar” a la institución.

Deportivo Winifreda se encuentra en la Primera División de la Liga Cultural de Fútbol de La Pampa, un certamen regional cuyos mejores clubes clasifican al Torneo Regional Federal Amateur, la cuarta categoría del fútbol argentino para entidades indirectamente afiliadas a AFA que nuclea a los extintos Federal B y Federal C, es decir, un escalón por debajo del Federal A. 

Julio Furch venía de jugar en Banfield, club al que llegó en mediados de este año y con el que tenía contrato por un año más, aunque decidió interrumpirlo, luego de haber disputado apenas 7 partidos, sin convertir goles. 

Por lo tanto, y a los 36 años, Furch decidió dejar el fútbol grande y volver al Deportivo Winifreda, en el que se forjó desde su niñez.

Nacido en la localidad en la que se radica el club, un pueblo con 2.675 habitantes, según el censo nacional de 2022, el camino de Furch en Deportivo Winifreda comenzó a sus cinco años.

Jugó en categorías infantiles hasta 1999, cuando con 10 años pasó a Deportivo Mac Allister, club fundado por Carlos Mac Allister, padre de Alexis, campeón del mundo, hasta que volvió al conjunto winifredense cinco años después.

Su debut en el primer equipo se dio en 2006, con 17 años.

Luego de pasar durante un breve periodo de tiempo por All Boys de Santa Rosa, un miembro del cuerpo técnico acercó un video suyo enfrenando a Olimpo de Bahía Blanca, club que decidió ofrecerle una prueba y llevarlo a la pretemporada, haciéndole contrato a principios de 2009.

Su debut se dio a principios del año siguiente, en la Primera B Nacional, y se mantuvo en el conjunto bahiense hasta 2012, donde sus 7 goles en 52 partidos le dieron el apodo de “Emperador del gol”.

Luego de un breve e infructuoso paso por San Lorenzo, Furch tuvo ciclos en Arsenal y Belgrano de Córdoba, donde pudo demostrar su capacidad goleadora y desde allí emigró al fútbol mexicano, siendo adquirido por los Tiburones Rojos de Veracruz.

Allí disputó tres torneos, con 33 goles en 80 partidos, y dio el salto al Santos Laguna, club en el que más partidos disputó.

Al club verdiblanco mexicano le dio los mejores años de su carrera, permaneciendo desde 2017 hasta 2020, y llegando a registrar un promedio de un gol cada menos de dos partidos, en la temporada 2018/19. Se fue con 69 goles en su haber, tras 163 partidos.

Su tercer club en México fue Atlas, en el que jugó hasta 2023, con 25 goles convertidos, hasta llegar al Santos de Pelé.

Le tocó ser parte del club en el año de su recordado descenso a la Serie B, aunque colaboró en la vuelta a Primera, con nueve tantos en el ascenso brasileño.