Mendoza endeudada: se dispararon 15,8% los préstamos en el primer trimestre

En un contexto de inflación más moderada y tasas de interés en baja, el endeudamiento volvió a dispararse en Mendoza. Durante el primer trimestre de 2025, tanto hogares como empresas solicitaron créditos por cifras récord, superando ampliamente la suba de precios del período. El fenómeno no sólo refleja la necesidad de financiamiento en medio de la recesión, sino también un posible cambio de expectativas económicas.

Mientras el sector público aumentó fuertemente su demanda de fondos, fueron los trabajadores en relación de dependencia quienes más recursos captaron del sistema financiero. También crecieron con fuerza los préstamos a la construcción, la industria y el comercio.

En detalle, durante los primeros tres meses de este año los mendocinos pidieron $1,68 billones prestados, lo que dejó como resultado un incremento nominal del 15,8% en relación al trimestre anterior, cuando se solicitaron $1,4 billones. La suba fue considerablemente superior a la inflación de ese período, que fue de 8,6%.

Según datos publicados por la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza (DEIE), fueron $44.690 millones los que solicitó el sector público no financiero (79,8% más que el trimestre anterior) y $1,6 billones los que pidió el sector privado (14,7% más que en el período octubre-diciembre). 

Qué sector se endeudó más en 2024

También se observó un fuerte incremento de los préstamos en la comparación interanual. De acuerdo con las estadísticas publicadas por la DEIE, entre el primer trimestre de este año e igual período del 2024, la demanda de créditos subió 239% en términos nominales, en un período en el que la inflación avanzó 55,9%. 

El organismo no ofrece datos segmentados por rama de actividad para el primer trimestre de 2025, pero sí permite una comparación por rubro en el total anual. Los préstamos otorgados en Mendoza según la actividad económica mostraron un salto significativo entre diciembre de 2023 y el mismo mes de 2024. En total, el financiamiento trepó un 279%, al pasar de $413.598 millones a más de $1,5 billones, con un protagonismo creciente de los trabajadores en relación de dependencia, la construcción y la industria.

El rubro que más recursos concentró fue el de las personas físicas en relación de dependencia laboral, con un incremento del 328% interanual nominal (sin descontar el efecto de la inflación). Este segmento recibió préstamos por casi $495 mil millones al cierre de 2024, muy por encima de los $115 mil millones del año anterior.

También se destacan los aumentos en la construcción, con un salto del 310%, y en el comercio, que ascendió un 267%. Dentro de este último, la mayor suba se dio en el comercio al por menor (+264%), seguido por la venta y reparación de vehículos (+206%).

En cuanto al sector productivo, la industria manufacturera recibió un 267% más de financiamiento. Aunque todos los subrubros industriales crecieron en términos nominales, el mayor aumento se registró en la fabricación de sustancias y productos químicos, con una suba del 680%. Le siguió la fabricación de maquinaria y equipos, con un 433%.

Al momento de analizar los números, se debe tener en cuenta que en 2024 se registró una inflación del 118%, por lo que una parte importante de las subas se atribuye a la evolución del índice inflacionario. 

La producción primaria, que incluye a la agricultura, la ganadería y la pesca, tuvo un alza del 266% global. Dentro de ella, la pesca fue la de mayor variación relativa (+346%), aunque en términos absolutos sigue siendo una de las más bajas. La agricultura, en cambio, pasó de $44.334 millones a $165.822 millones, lo que representa un alza del 274%.

En el sector servicios, que creció 244% en el total, sobresalieron los préstamos destinados a hoteles y restaurantes, con un incremento del 466%, y los otorgados a enseñanza y salud, que aumentaron un 207%. En tanto, los préstamos al transporte y las comunicaciones crecieron un 380%.

Por otro lado, hubo un único rubro que presentó una caída: el de captación, depuración y distribución de agua, con una baja del 91%, aunque representa una fracción muy pequeña del total.

El crecimiento del crédito se dio en un contexto de desaceleración de la inflación y baja de las tasas de interés.