El proyecto solidario en Las Heras por el que Maru Botana denunció que fue estafada
La reconocida cocinera reclama una deuda de $60 millones a una constructora, acusándola de incumplir el compromiso de levantar una pastelería y cooperativa laboral para jóvenes vulnerables de la Fundación Conin en Mendoza.
La famosa cocinera Maru Botana atraviesa un conflicto judicial tras denunciar a la constructora Quiet Life Assistance por presunta estafa y fraude. Según información difundida en el programa A la tarde (América TV), la disputa se centra en el incumplimiento de un proyecto solidario que se iba a ubicar en Las Heras.
El acuerdo, gestado durante la pandemia, establecía que Botana cedería su imagen sin costo (sin cachet) para la campaña publicitaria de la constructora. A cambio, la empresa se comprometía a volcar ese valor en la construcción de una pastelería de 128 m² y un salón de usos múltiples para un centro nutricional de la Fundación Conin en una zona vulnerable de Las Heras.
El objetivo central era crear la "Cooperativa La Maru", un espacio que permitiría a decenas de jóvenes aprender un oficio, generar ingresos y obtener contención social.
Uso de imagen y deuda reclamada
A pesar de que la constructora utilizó la imagen de Botana en redes sociales, avisos y posteos institucionales durante aproximadamente dos años (entre 2021 y 2023), y celebró en octubre de 2023 la inminente puesta en marcha del proyecto, la obra nunca se realizó. Botana confirmó que, a pesar de las promesas, el terreno en Las Heras "continuó vacío, arrasado y árido".
En declaraciones al ciclo televisivo, la cocinera expresó su "bronca y tristeza" por haber ilusionado a los beneficiarios de Conin con una obra que jamás comenzó.
El caso ya fue judicializado. Según detalló el periodista Luis Bremer, existe documentación certificada que respalda el convenio entre las partes. El reclamo económico asciende a 60 millones de pesos, cifra que corresponde al valor de la obra prometida y al uso comercial de la imagen de Botana sin que se concretara el fin solidario.
Botana informó que la única explicación recibida por el incumplimiento fue la "disolución de un socio" y que la empresa "la dejó en banda" sin ofrecer respuestas formales. La prioridad de la cocinera, aunque dolida por el desgaste emocional, es que "se haga justicia" y que se repare el daño causado por la frustración de un proyecto destinado a la alimentación y el empleo en un contexto de vulnerabilidad.