Cercos verdes: tres plantas ideales para incrementar la privacidad
Descubre las especies más recomendadas para crear cercos vivos densos, de rápido crecimiento y fácil mantenimiento, transformando tu espacio exterior en un oasis de verdor y funcionalidad.
Los cercos verdes son mucho más que una simple barrera; son elementos clave en el diseño paisajístico que brindan privacidad, reducen el ruido, protegen del viento y añaden un toque de biodiversidad y frescura a cualquier jardín. Elegir las plantas adecuadas es fundamental para asegurar su éxito y disfrutar de un cerco frondoso y saludable. Aquí te presentamos tres plantas ideales para cercos verdes, destacadas por su crecimiento, densidad y adaptabilidad.
Photinia (Photinia x fraseri 'Red Robin'): Esta planta es una de las favoritas para setos vivos debido a su espectacular follaje. Lo que la hace única son sus brotes nuevos de un vibrante color rojo intenso, que contrastan maravillosamente con las hojas verdes maduras. La Photinia es de crecimiento rápido y forma una barrera densa que ofrece excelente privacidad durante todo el año. Requiere poda regular para mantener su forma y fomentar el brote de nuevas hojas rojizas. Se adapta bien a pleno sol o semisombra y tolera diversas condiciones de suelo, siempre que tenga buen drenaje.
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Ligustrina (Ligustrum lucidum): Un clásico indiscutido en la jardinería para cercos vivos. La ligustrina es un arbusto de hoja perenne con un crecimiento muy rápido y un follaje denso y brillante. Es extremadamente rústica y adaptable a diferentes climas y tipos de suelo, lo que la convierte en una opción segura y de bajo mantenimiento. Su capacidad para soportar podas frecuentes permite darle la forma deseada, creando barreras uniformes y tupidas en poco tiempo. Es perfecta para quienes buscan una solución práctica y eficaz para delimitar espacios.
Eugenia (Eugenia myrtifolia): También conocida como arrayán o mirto australiano, la Eugenia es una excelente elección para cercos verdes gracias a su crecimiento vigoroso y su follaje compacto. Sus hojas pequeñas, brillantes y sus nuevos brotes con tonos rojizos o cobrizos le otorgan un atractivo ornamental constante. Además, produce pequeñas flores blancas y bayas rojas que atraen a la fauna local, contribuyendo a la biodiversidad del jardín. Es resistente y se adapta a distintos suelos, requiriendo podas para mantener la densidad y forma deseada.
Al seleccionar cualquiera de estas plantas para setos, no solo obtendrás privacidad y protección, sino que también embellecerás tu entorno con un elemento natural, dinámico y lleno de vida. Un buen mantenimiento y las podas adecuadas garantizarán que tus cercos verdes permanezcan saludables y atractivos por muchos años.