La verdad detrás de la "baja" en la tarifa de luz
Si bien mayo trajo una leve reducción en las facturas de electricidad, expertos advierten que esta "baja" es transitoria y anticipan nuevos incrementos debido a deudas pendientes con las distribuidoras.
Este mes bajó la luz, sí, pero todas las condiciones están dadas para que pronto vuelva a aumentar y lo haga por encima del índice inflacionario. Para entender el por qué, es necesario tener claro primero a qué se debió la reducción de la tarifa aplicada a partir del 1° de mayo.
Según explicaron desde el EPRE, la baja del 4% en las facturas se implementó tras la finalización, el pasado 30 de abril, del reconocimiento de los diferenciales de ingreso que surgieron por el escalonamiento de los impactos que se aplicaron durante los meses de junio, julio y agosto de 2024 (variación que debía aplicarse en mayo de ese año) y en los meses de septiembre y octubre (el que debía aplicarse en agosto de 2024). Dicho escalonamiento se produjo con el fin de mitigar el impacto de las variaciones tarifarias en los usuarios y acompañar el sendero desinflacionario que se visualizaba en aquel momento.
Pasando en limpio, en 2025 se pagaron parte de los aumentos que se debían abonar el año pasado. Cuando los usuarios se pusieron “al día”, el gobernador Alfredo Cornejo anunció una baja tarifaria.
Lo cierto es que las tarifas no bajaron, sino que volvieron al punto de partida antes de que iniciara el período de compensación para las empresas.
Por qué volverían a subir
Como se mencionó, el adicional que tuvieron que pagar los mendocinos responde a una diferencia entre lo que se tenía que cobrar y lo que finalmente pagaron los usuarios.
Según fuentes cercanas al sector, existen muchos otros retrasos tarifarios que aún restan por compensar. “Los atrasos se producen cuando el Ente Provincial Regulador Eléctrico (EPRE) determina un incremento del Valor Agregado de Distribución (VAD) y el Gobierno decide no aplicarlo. Eso se convierte en Ingresos No Percibidos (INP)”, comentaron.
“Estos INP, en su momento generaron una ‘bola’ muy importante, primero con el ex ministro Julio De Vido y después con la pandemia. También Cornejo, por diferentes cuestiones, fue atrasado las tarifas”, mencionaron.
Ahora bien, está claro que los atrasos no pueden ser eternos, porque desfinancian al sistema y generan pérdidas para las compañías Por eso el Gobierno de Mendoza aplicó el sobrecosto de compensación meses atrás y por eso deberá volver a hacerlo en el futuro. Cuando eso ocurra, muy probablemente se generen incrementos tarifarios por encima de la inflación, ya que las tarifas de por sí se van actualizando periódicamente en función del IPC y de otras variables económicas.
“Hay otros INP pendientes y las subas tarifarias van a llegar”, aseguraron.
Mendoza, entre las más caras
A fines del año pasado Mendoza fue noticia a nivel nacional, porque se había convertido en la provincia más cara para el consumo de luz. Luego, fue superada por Río Negro, pero los usuarios locales continúan pagando una boleta muy por encima de la media.
Si bien está claro que la boleta promedio de los mendocinos bajará, luego de la reducción del 4% en las tarifas, Mendoza seguirá estando entre las más caras del país. Según un informe reciente de la UBA y el Conicet, un usuario de ingresos bajos de Mendoza pagó en marzo una factura promedio de $54.381, por un consumo de 265 Kwh/mes. En otras provincias de tamaño similar los montos son mucho menores. En Santa Fe, por ejemplo, se pagan $45.134 y en Córdoba se abonan $40.507.
Son mucho menores las facturas de luz que se pagan en San Juan ($33.400), San Luis ($32.585) y el AMBA ($15.476), por citar algunos ejemplos.
Con la baja del 4%, la boleta del servicio eléctrico mendocino se retrocederá a unos $50.500, por lo que seguirá siendo la segunda más cara del país, sólo superada por Río Negro, donde se pagan $54.381.
Baja por un lado, aumento por el otro
Desde el EPRE explicaron que la reducción del costo del Valor Agregado de Distribución fue en realidad del 6%, pero el impacto terminó siendo del 4% porque al mismo tiempo tuvo un incremento en otro componente.
En concreto, se hizo la actualización de los nuevos precios de energía, potencia y transporte en el mercado eléctrico mayorista establecidos por la Secretaría de Energía de Nación. Estos inciden en el componente de la tarifa “Costo de abastecimiento”, de jurisdicción nacional (Resolución 171/2025, publicada en Boletín Oficial el 29/04/2025), correspondientes al periodo comprendido entre el 1 de mayo y el 31 de octubre de 2025, generando un impacto del orden del 1,5% en las tarifas de usuarios finales.
El efecto conjunto de la implementación de ambas medidas significa una reducción en la tarifa del servicio eléctrico a usuario final del orden del -4% promedio a partir de los consumos registrados desde el 1 de mayo de 2025. En particular, para los usuarios residenciales, que representan el 85% de los usuarios de la Provincia, la reducción es del 4,6%.