“Es imposible que el agua de San Jorge no llegue al río”
El especialista advierte sobre los estudios geológicos que indican el destino de los líquidos de la minera.
-¿Qué le falta a la gestión de Irrigación?
-Hacer foco en el agua subterránea. El Departamento General de Irrigación nace como el organismo que maneja el agua superficial. La famosa ley de creación de Irrigación se refiere al agua superficial. Ha sido omitida el agua subterránea. Ha pasado el tiempo y en algunas épocas se le ha prestado atención, se han hecho inventarios de agua subterránea, se ha estudiado su calidad y montones de variables que tienen que ver con esto. Pero la gestión del agua subterránea ha estado cargo sólo de una oficina. Han habido muchas cosas raras siempre con el agua subterránea. Pero este el problema es que toda la información que hay se esconde o cuesta encontrarla.
La información que hay sobre el agua subterránea en Mendoza, es una reliquia que no se repite en otro lugar de del país ni de América Latina. Es muy buena la calidad del trabajo que se ha hecho desde que se empezó a trabajar con un plan de agua subterránea. A partir de allí se han elaborado muchas cosas, hay mucha información y esa información no pierde vigencia. Pero esa información no se usa.
-¿Ha podido ver algo del Código de Agua que quiere sacar Irrigación?
-Lo he visto, pero no tiene consenso, no lo quiere la gente. Veo que en el proceso de armar el Código, hay tantos intereses metidos que ya se complica todo. Por ejemplo, ya empieza a abrir una puertita allí para decir que el uso del agua para la minería puede ser prioritario.
Con San Jorge hay un problema tremendo, el problema es el de esa cuenca que es muy simple y se planteó bien de entrada. Ningún efluente de San Jorge, ningún agua servida de la minera vaya a parar al río Mendoza. La empresa tenía que probar que geológicamente, es imposible que el agua de San Jorge pueda llegar al río Mendoza o a Uspallata. Un informe del Doctor José María Cortés que es geólogo, investigador del Conicet y profesor retirado de la UBA, fue incorporado al expediente y advierte que las cuencas subterráneas están conectadas. Si hay contaminación, puede llegar al río Mendoza. Ya en 2010 Cortés había advertido sobre lo mismo; en este nuevo informe refuta las interpretaciones que presentó la minera a partir de estudios más recientes. Hay estudios que indica que no hay forma de que el agua de San Jorge, no llegue al río o a Uspallata. Y llega porque el terreno de San Jorge está arriba y todo baja.