Cuál es el "enemigo natural" de Leo 

Cada uno de los signos del Zodiaco tiene características particulares y rasgos de personalidad que se atribuyen a las personas nacidas bajo su influencia.  Debido a esto, algunos signos son más compatibles que otros. 

Leo, por ejemplo, es el quinto signo en la rueda zodiacal y según la astrología se destaca por su vitalidad, individualidad,  autoexpresión, creatividad y por su puesto su gran ego.

Cuál es el “enemigo natural” de Leo

Cuando hablamos de “enemigos naturales” nos referimos a signos cuyas energía chocan o simplemente no se compatibilizan. No es lo mismo el “enemigo natural” que el signo opuesto complementario. 

Como hemos explicado en artículos anteriores, los signos opuestos y complementarios son los que se encuentran enfrentados en la rueda zodiacal. Aunque sean opuestos, la relación entre estos signos suele ser muy enriquecedora. 

Según la astrología, se podría decir que el “enemigo natural” de Leo es el signo Tauro. Tauro, al ser un signo de Tierra, tiene una energía enfocada en la estabilidad, la seguridad, la rutina y también en la posesión. Es un signo que le cuestan mucho los cambios. 

Leo, por otra parte, es fuego. Es un líder por naturaleza y posee una fuerte energía orientada hacia la creatividad y al reconocimiento. Les gusta ser el centro de atención y esto puede molestarle a otros signos del Zodiaco. 

Leo puede sentir que Tauro es demasiado "plano" o que no le presta la suficiente atención o admiración que cree merecer y Tauro puede ver a Leo como egocéntrico, dramático o demandante de demasiada validación externa.